‘I want to talk about Duras’, la relación de la escritora Marguerite Duras con su joven amante Yann Andréa, 38 años más joven que ella, es una de las películas presentadas el lunes en el Festival de San Sebastián dentro de la Sección Oficial.
Dirigida por la francesa Claire Simon, admiradora de la escritora, la realizadora narró en rueda de prensa que se sintió fascinada cuando salió a la luz que el joven amante había grabado unas cintas en que narraba la experiencia. La película se ha presentado en Donostia con la propia Simon y los principales actores: Swann Arlaud como Yann, y Emmanuelle Devos, que interpreta a la periodista que grabó las cintas.
La fascinación de la directora por la historia no ha sido, de primeras, muy compartida por el público donostiarra, que ha asistido un tanto frío a la narración del hombre y a los vericuetos de «una historia de amor» que se fraguó primero de forma epistolar y tardó en consumarse con el encuentro.
La relación de Duras y Yann duró desde 1980 hasta la muerte de la escritora en 1996.
‘Distancia de rescate’, una coproducción entre cuatro países (Perú, Chile, España y EEUU) dirigida por la peruana Claudia Llosa, está basada en una novela de Samanta Schweblin que colaboró para hacer realidad esta obra que se acerca al género de terror y que también compite en la Sección Oficial del Zinemaldia.
Con la maternidad y sus miedos como grandes temas, la historia que se narra transcurre en Argentina y responde al encuentro entre dos mujeres, Amanda y Carola (María Valverde y Dolores Fonzi). Ésta última, actriz argentina, ha contado que leyó el libro casualmente poco antes de que le ofrecieran el papel, lo cual fue «un regalo».
La fascinación de Amanda por Carola fue trabajada por las dos actrices de manera real, conviviendo durante el rodaje, y de hecho Fonzi ha explicado que durante el mismo vivió un auténtico retiro que le ayudó a concentrarse absolutamente en su papel.
«Nos llevamos muy bien la conexión fue total», añadió Fonzi, y la actriz española María Valverde añadió que la fascinación que siente su personaje por el de la amiga tiene al que ella siente por Fonzi en la vida real.
La tercera película que se presentó a concurso este lunes es la rumana ‘Blue moon’, que muestra la cruda realidad que se vive en entornos rurales en que los estudios para las mujeres no son una opción extendida (la directora Alina Grigore ha narrado que en su entorno ella fue la única en abandonar la comunidad donde se crió para ir a estudiar). «Las chicas se ven forzadas a salir fuera y hay una manipulación por la que tienen que casarse, salir al extranjero para trabajar y tener hijos», a narrado.
‘Blue moon’ narra la historia de una joven, Irina, de 22 años, que quiere precisamente eso, ir a Bucarest a estudiar, pero que está inmersa en un mundo donde los hombres toman las decisiones y donde la violencia, además, es latente.
Los actores Ioana Chitu, Mircea Postelnicu y Vlad Ivanov, con los que la realizadora trabajó concienzudamente, están también a Donostia para defender esta obra que Alina Grigore relaciona con el lugar donde ella se crió. De hecho habló allí con varias mujeres jóvenes y sus testimonios fueron clave para la historia.
Es la primera vez de la actriz Alina Grigori al otro lado de la cámara.
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