Llega el invierno y los refugiados que viven en el campo de Lesbos (Grecia) están en chanclas «con un frío terrible». Así lo ha narrado esta mañana Peio García Amiano, de Zaporeak, en el Ayuntamiento, acompañado por el alcalde de Donostia Eneko Goia y dando las gracias a quienes apoyan a una organización que alimenta a miles de personas diariamente. «Sin faltar un solo día» ni durante lo peor de la pandemia gracias al personal local con que cuenta la asociación.
El 13 de noviembre habrá una recogida de zapatos en la plaza Gipuzkoa, zapatillas y botas también, y por supuesto de invierno. Y junto a los puntos de la recogida se pondrá una hucha porque el traslado del contenedor supone un gasto de 7.000 euros.
«El de Zaporeak es un proyecto de todos los vascos», ha insistido García Amiano dando las gracias por adelantado porque sabe que, una vez más, lograrán su objetivo. Y narrando la angustia que supone ver que el problema de los refugiados en Grecia, lejos de arreglarse, es creciente.
La recogida de calzado también pasará por las otras dos capitales vascas y por Pamplona.
Se acerca el invierno y en los campos de refugiados el frio se nota más que nunca. Viven en tiendas de campaña donde el frio se cala hasta los huesos ya que los gobiernos no invierten en una adecuación del campo para convertirlo en un lugar habitable pic.twitter.com/8oaNgFIK8E
— Zaporeak (@ProyectoSabores) November 8, 2021
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