La organización donostiarra Zaporeak, que nació para cubrir una necesidad tan básica como la alimentación de las personas que recalaban en Grecia huyendo de la guerra, vuelve a estar contra las cuerdas por la llegada creciente de refugiados palestinos que se suman a los de Siria, Afganistán etc. «De las 144 personas que llegaron entre el lunes 13 y el miércoles 15 de noviembre 39 venían de Palestina», explican la entidad en un comunicado.
A día de hoy en en el campo de Kara Tepe, en la isla griega de Lesbos, hay un total de 4.418 personas registradas como refugiadas de las cuales casi el 20% es menor de 12 años, y más de 1.000 personas que no tienen ningún documento en su proceso de asilo.
«De esta manera las 2.500 raciones de comida que cocinamos se quedan cortas», advierten desde Zaporeak, que el 14 de noviembre repartió 2.700 raciones «para decenas de familias en situación de vulnerabilidad que no estaban registradas, pero necesitaban una ración de comida». Cómo ayudar a Zaporeak, aquí.
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