(EFE). El Grupo Uvesco, que gestiona las enseñas BM y Super Amara, ha logrado crecer un 5 % en 2022 con una estrategia basada en «reducir márgenes y aumentar promociones» para combatir la escalada de la inflación que requiere, a su juicio, rebajas adicionales del IVA en productos como «la carne o el pescado».
El presidente y el consejero delegado del Grupo Uvesco, Jose Ramón Fernández de Barrena y Ángel Jareño, respectivamente, han informado este martes en una rueda de prensa en San Sebastián de los resultados y perspectivas de este grupo empresarial, que logró el año pasado unas ventas netas de IVA de 986 millones de euros.
Fernández de Barrena ha destacado el «esfuerzo» llevado a cabo por la compañía para mitigar las tensiones inflacionistas y ha precisado que, según datos de la consultora Nielsen, la subida media de la cesta de productos de gran consumo en España ha sido del 8,5 %, mientras que en el caso de los supermercados Uvesco se sitúa en el 7 %.
Ha destacado que «adicionalmente» el grupo invirtió en 2022 más de 23 millones de euros en vales descuento y cupones, además de reducir un 0,4 sus márgenes, y ha subrayado que estas medidas han sido posibles gracias a que la compañía tenía limitado el precio de la energía eléctrica.
«Nuestra idea es mantener esta actividad promocional e incluso aumentarla» un 20 % este año pese a los «márgenes tan ajustados que tenemos», ha subrayado Fernández de Barrena.
Ha asegurado que «no se puede hacer un esfuerzo excesivo en precios de venta sin que la cadena de valor se resienta». «Nosotros podemos hacer un pequeño ajuste en márgenes, pero el productor local igual no puede«, ha advertido.
Se ha mostrado partidario de impulsar una fórmula que resulte «sostenible» para todos los eslabones, incluida la administración y ha opinado que hay margen para rebajar el IVA en carne y pescado y también para presionar a grandes «proveedores industriales», algunos multinacionales, para que «rebajen sus tarifas» ya que de «forma automática se reducirán los precios» en los lineales.
La escalada de los precios ha traído también un cambio en los hábitos de consumo en los supermercados ya que existe una menor «fidelización de los clientes, que pican más en diferentes cadenas», realizan más visitas a las tiendas, hacen compras de menor importe y consumen más marca blanca, precisan los responsables de Uvesco.
Pese al complejo escenario que ha vivido la distribución en 2022, Uvesco ha cerrado el ejercicio con un crecimiento del 5,3 %, en línea con el de los últimos años, hasta alcanzar unas ventas netas de IVA de 986 millones de euros.
La compañía, que abrió siete establecimientos propios en 2022, terminó el año con 264 tiendas en País Vasco, Cantabria, Navarra, La Rioja, Madrid y Ávila, así como 19 franquicias BM Shop y la plataforma e-commerce, que registró un incremento de sus ventas del 16 %.
Respecto a 2023, Jareño ha explicado que se prevé una inversión de 35 millones de euros que permitirá la puesta en marcha de nueve supermercados -dos en Gipuzkoa, uno en Álava, uno en Navarra y cinco en la Comunidad de Madrid- y la apertura de ocho nuevas franquicias.
No obstante, Uvesco tiene entre sus objetivos abordar una operación de adquisición de alguna cadena a «corto o medio plazo» tal y como recoge el propio plan estratégico de un grupo, que cuenta con 6.000 trabajadores y que mantiene su sede en Irun tras la entrada mayoritaria en su capital del fondo de inversión PAI Partners.
Deja un comentario