Se sube por las paredes Juan Ignacio García Velilla, de la asociación patrimonialista Áncora, cuando recorre Urgull para observar y fotografiar los efectos de las obras de saneamiento que mucho están dando que hablar en Donostia. Sin embargo García Velilla, nada conforme con las explicaciones municipales, va más allá de las críticas y pide al Ayuntamiento intervenga cuanto antes «porque aún se está a tiempo» y que no se deje llevar «por el amor propio de los técnicos». Por otro lado el experto parodia que se afirme que la maleza cubrirá las tuberías y demás maquinaria. «¿Pero qué vegetación?, ¿la del Orinoco?, porque si la maleza sube tanto también va a tapar el arranque de los muros…»
El alcalde Eneko Goia expresó el pasado día 16 que son conscientes de las críticas y están «vigilantes». «Era una necesidad evidente introducir el saneamiento en Urgull como se vio hace un año por la intensidad de uso del enclave. Se redactó el proyecto y se está ejecutando. Yo mismo me he preocupado al ver algunas imágenes y desde Donostia Kultura y Urbanismo también están vigilantes. Hemos hablado con Obras y Proyectos y nos indican que está sin terminar, que hay cuestiones pendientes y que algunas fotos no representan la realidad porque aquello se cubrirá con maleza y tierra. Entiendo la sensibilidad sobre elementos patrimoniales y la comparto. Y no me gustaría que se causara un perjuicio».
Para García Velilla se trata directamente de «una aberración sin precedentes» o de «una salvajada». «Nadie ha controlado nada. Se han hecho bajantes tremendas por la muralla cuando había lugares más cortos para hacerlas, no nos explicamos cómo se ha trabajado de forma tan tosca y burda. La muralla es de los pocos elementos históricos que tenemos en Donostia. El sello de San Sebastián es un barco y un fuerte, y éste le da impronta a la ciudad. Y se está agrediendo con facilidad e ignorancia».
Dice García Velilla que la explicación de la maleza y la tierra es «una disculpa» porque algunos de los elementos que dañan la imagen están a una altura importante y «se taparía también el arranque de los muros que es histórico y se afianza en la roca. Además, ¿qué maleza podría cubrir eso?, ¿la del Orinoco?»
El experto denuncia que una bajante de doce metros del sur meridional se ve desde Miraconcha «mientras hay en el muro oeste algunos puntos donde hay solo tres metros. ¿No se podía hacer por ahí?, han ido a lo cómodo, a lo fácil».
«Lo único bueno», en opinión de García Velilla, «es que hay una solución porque hoy en día todo es reversible y se pueden meter los tubos por otros sitios».
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