Rachas de viento de 100 Km/hora y un importante oleaje han sido protagonistas al término de la jornada del míercoles, tal y como había advertido Euskalmet con su Aviso Amarillo. El viento ha dejado un rastro en Donostia de árboles rotos y caídos y contenedores fuera de lugar en prácticamente toda la ciudad, aunque lo más llamativo ha sido el barco de recreo que suelto del amarre ha llegado empujado por las olas hasta el paseo de la Concha.
Los tamarindos han sido muy dañados en algunos casos, así como árboles de otros barrios como Amara, algunos de los cuales han tenido que ser retirados por el riesgo que suponían para los viandantes.
Durante toda la jornada del jueves y la del viernes se mantendrá el Aviso Amarillo debido al oleaje, ya no por viento, con olas que podrían superar los tres y cuatro metros según Euskalmet.
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