Desde Eguzki tienen claro que un solo análisis semanal no es suficiente para garantizar la calidad del agua a los bañistas. Así lo ha expresado esta tarde el ecologista Juan Mari Beldarrain al referirse a episodios de contaminación como los vividos en el Pico del Loro y el Tenis este mismo verano. «Los análisis se hacen en lunes y si el vertido no se ha producido ese mismo día, no queda reflejado». Además el sistema de control resulta muy lento, ya que la contaminación del lunes se conoce el martes y ese día se vuelve a tomar otra muestra que se constata el miércoles, día en que se da el aviso. Así que desde Eguzki suman a la falta de frecuencia en los análisis «la lentitud» en que se advierte a la población de que no conviene bañarse.
Desde hace cuatro o cinco años suelen darse en la zona del Pico del Loro y del Tenis episodios de contaminación que también se han dado este verano en que incluso ha llegado a ondear una bandera roja. «Probablemente el vertido sea de residuos domésticos», opinan desde Eguzki, que siempre ha defendido que se trataba de un vertido de carácter estructural y no proveniente de alguna embarcación como se apuntó hace años. En todo caso «los técnicos buscan el origen y no lo encuentran».
Estos episodios de contaminación no se dan sólo en Donostia. También en Orio, por ejemplo, y en el Puerto de Mutriku afectando a la playa de Saturraran. Dentro de Donostia también se han dado en los últimos meses algunos casos de contaminación en el dique de la Zurriola y en el Náutico.
Este año corrió la voz de que tras el baño en la zona del Pico del Loro varios ciudadanos sufrieron vómitos, posibilidad que también llegó a Eguzki. «No es fácil de demostrar, pero efectivamente nos llamaron. En todo caso a nosotros no nos consta que el baño provocara esos síntomas mientras duró la contaminación».
Al grupo ecologista también les han llegado este año las críticas de algunos bañistas por lo que han considerado suciedad del agua, concretamente en la Concha. «En todo caso hay que diferenciar la suciedad de los elementos flotantes de la contaminación, que a lo mejor se está dando en un día en que aparentemente el agua está perfecta», explicó Beldarrain, para quien el agua está en condiciones similares a las de años pasados y no ha observado que se encuentre más sucia.
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