«Nuestros jóvenes deberían cobrar un 131% más de lo que cobran para poder acceder a una vivienda en alquiler, según una encuesta recién publicada por el Observatorio Vasco de la Juventud». Es una de las observaciones hechas hoy por Stop Desahucios en el Boulevard, donde ha presentado un manifiesto que registrará en el Gobierno vasco y en varios ayuntamientos. Partidos políticos y asociaciones se han adherido al manifiesto.
«El presupuesto que hoy día se destina a vivienda aún es un 33% inferior al que se destinaba en 2010 (457 millones frente a los 300 actuales)», ha denunciado Stop Desahucios, «y las familias en riesgo de exclusión social objeto de desahucio con menores, discapacitados, etc, aún no tienen garantizada una alternativa habitacional en cumplimiento de los Dictámenes del comité DESC de la ONU. A esto hay que añadir que los desahucios de alquileres en Euskadi en 2018 alcanzaron a 847 familias, la cifra más alta de la serie estadística del Consejo General del Poder Judicial», ha contextualizado la plataforma para exigir una serie de seis medidas.
A grandes rasgos éstas son: Aumentar el número de viviendas ante emergencias para que ningún colectivo vulnerable se quede sin techo si es desahuciado, medidas presupuestarias de choque para aumentar el parque de viviendas en alquiler, movilizar la vivienda vacía, combatir la especulación, modificar la fiscalidad relacionada con la vivienda y cumplir con la Ley de Vivienda.
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