Han sido 5.000 pensionistas de toda la CAV los reunidos hoy ante el Parlamento en Gasteiz para reclamar que las instituciones vascas complementen las cifras hasta lograr los 1.080 euros de pensión mínima. Desde Gipuzkoa han viajado 16 autobuses, 21 de Bizkaia y dos de Araba, además de que otros han acudido en coche o viven en las cercanías. «Seguimos fuertes. Seguimos concentrándonos además de en las capitales en 70 pueblos grandes, medianos y pequeños de la Comunidad Autónoma Vasca», han manifestado allí visiblemente satisfechos.
«Esta concentración ha sido el reflejo de la indignación y del ánimo que seguimos teniendo las pensionistas. Deben atender a las personas que tienen una pensión baja y complementar una pensión mínima de 1080 euros», han expresado durante el encuentro.
«Hoy 12 de diciembre ni siquiera sabemos cuál va a ser nuestra pensión en enero. El actual gobierno del Estado ha tenido desde mayo de 2018 tiempo suficiente para garantizar por Ley la revalorización automática de nuestras pensiones. No lo
ha hecho, no ha tenido voluntad. Ha podido derogar la reforma laboral de 2010 y 2012 y los aspectos regresivos de las reformas de pensiones de 2011 y 2013, ha podido elevar la pensión mínima a 1080 euros y el Salario Mínimo Interprofesional a 1.200 acercándose a las exigencias de la Carta Social Europea, ha podido tomar medidas para erradicar la brecha de género en salarios y pensiones y ha podido eliminar las penalizaciones de la jubilación anticipada con 40 años y no lo han hecho».
Los pensionistas llaman con estos mismos retos y con los 1.080 euros de pensión mínima como objetivo a tomar parte en la huelga del 30 de enero.
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