Después de tres años cerrado se abre un posible futuro para el edificio Basollua, más conocido como el Merendero de Ulia. Y es que esta mañana la Junta de Gobierno Local ha aprobado el pliego para la adjudicación de la concesión administrativa. La concesión se otorgará por un plazo de 10 años y podrá ser prorrogado, por mutuo acuerdo entre las partes, por plazos anuales hasta un máximo de 5.
El edificio deberá destinarse a café-merendero y la concesionaria deberá acometer una inversión mínima para la adecuación del inmueble por valor de 89.744 euros (+ IVA), mejorable al alza.
En cuanto al régimen económico, estará constituido por un canon mínimo fijo de 3.000 euros mejorable al alza; más un 2% de la cifra de ventas de la explotación (facturación) IVA excluido, que no es susceptible de mejora. Los primeros 12 meses de explotación estarán exentos de canon.
Cabe recordar que este edificio se sitúa dentro del Parque Municipal de Ulia y es un bien de dominio y servicio púbico de titularidad municipal, con una superficie construida de 261,50 m² de techo, 235,10 m² útiles en planta baja, y espacios exteriores, patios y escalinata.
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