Las aguas siguen bajando revueltas en el conflicto de las residencias de Gipuzkoa. El 10 de marzo concluyó la última huelga de 19 días convocada por el sindicato ELA, mayoritario en el sector, pero no hay solución a la vista, entre acusaciones cruzadas de varios de los bandos implicados. Y ELA ha decidido convocar otros 27 días más de huelga, entre los días 1 de abril y 10 de mayo.
Según el comunicado del sindicato, «las delegadas de ELA hemos decidido seguir el camino emprendido y convocar una nueva tanda de huelga», que se desarrollaría en dos tramos. El primero comprenderá entre los días 1 y 12 de abril, y el segundo entre el 26 de abril y el 10 de mayo; en total, 27 jornadas de nuevos paros.
En su nota de prensa, ELA quiere recordar «que estamos ante la negociación de las residencias y centros de día de Gipuzkoa, que atañe a mas de 5.000 trabajadoras. Una negociación que empezó hace dos años, en 2017, y que a día de hoy está en una situación muy delicada por el sabotaje de la Diputación».
El sindicato sigue asegurando lo que últimamente niegan otros agentes implicados: que «ha llegado a un preacuerdo con la mayoría de las patronales», y que la diputada gipuzkoana del ramo, Maite Peña, «ha sido conocedora e impulsora del mismo desde el primer día, y saboteadora del mismo una vez materializado». Un acuerdo que, enumera ELA, tiene los siguientes contenidos:
– Firma simultánea de los convenios sectoriales y de empresa.
– Vigencia 2017 – 2020
– Subida salarial IPC + 8 repartido en 4 años.
– Antigüedad de 42 euros, para 2021.
– (Plus) Domingos y festivos 45 euros, para 2021.
– Días de asuntos propios, 3 para 2021.
– Descanso de 20 minutos retribuidos, para 2020.
– Excedencia de seis años hasta que el hijo tenga 10 años, y cinco años para cuidado de personas dependiente.
– Reducción de jornada: hasta los 15 años de los hijos.
– Empleo: contratos indefinidos y al 100% de base.
Reclamaciones para todas las partes
Dicho lo cual, ELA pide a la diputación «que deje de lado las mentiras y financie un acuerdo que mejorara las condiciones de las más de 5.000 trabajadoras del sector. Es decir, que sea responsable con el dinero de todas las gipuzkoana, y asuma la responsabilidad que le toca». Además, entre otras reivindicaciones dirigidas al ente foral, «que deje de financiar a las empresas al 100% en días de huelga. Esto es gravísimo. Lo que faltaba es que con el conflicto las empresas privadas además se lucren».
También tiene ELA críticas para las patronales que, «tras bloquear la mesa durante dos años y no mostrar ninguna intención de negociar, se constata que solo se mueven por beneficio y negocio». A dos de ellas, Adegi y Matia 2020, les comenta que «se están equivocando firmando un documento» (negando el acuerdo antes detallado), justo el día que ELA realizó «la comparecencia en las Juntas Generales, denunciando las mentiras y falsificaciones de la Diputación». Cree el sindicato que dichas patronales han cedido a las presiones de la Diputación, «por tanto se convierten en cómplices y responsables de sus mentiras y falsificaciones».
A los familiares, ELA les exige «que reclamen la parte proporcional del dinero que pagan por un servicio que no se da en días de huelga». Y a las trabajadoras, «que secunden masivamente la huelga, y tomen parte en la multitud de movilizaciones que hagamos».
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