(EFE). El décimo aniversario del fin de las acciones de ETA ha estado dominado este miércoles por el recuerdo a las víctimas de la banda terrorista, a través de diversos actos institucionales, y por una nueva polémica sobre los presos de la organización.
Fue el 20 de octubre de 2011 cuanto ETA hizo público el histórico comunicado en el que anunciaba el «cese definitivo de su actividad armada», tras dejar 853 víctimas mortales desde que en 1968 cometiera su primer asesinato.
La jornada de este décimo aniversario ha comenzado con polémica, a cuenta de unas palabras del coordinador general de EH Bildu, Arnaldo Otegi, en las que señaló que «si para que salgan los 200 presos» de ETA «hay que votar los presupuestos» generales del Estado, su formación «los votará».
Otegi habló así ante un grupo de militantes en Eibar el pasado lunes, horas después de la declaración realizada por el propio coordinador de EH Bildu en la que transmitía a las víctimas de ETA su «pesar y dolor por el sufrimiento padecido», que -dijo- «nunca debió haberse producido».
En una nueva declaración hecha pública esta tarde, el secretario general de Sortu, Arkaitz Rodríguez, ha afirmado que su formación política, heredera de Batasuna, trata de «construir puentes y no de cavar trincheras», y ha asegurado que resulta necesario «dar una solución al asunto de los presos» de ETA, así como «dar pasos en el reconocimiento de todas las víctimas».
En la sesión de control del Congreso celebrada esta mañana, el líder del PP, Pablo Casado, se ha hecho eco de las palabras de Otegi y le ha preguntado a Pedro Sánchez si va a sacar de la cárcel a 200 terroristas para que EH Bildu le apoye los presupuestos, ante lo cual el presidente del Gobierno ha respondido con un «no rotundo».
Fuera del hemiciclo, la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha indicado que solo habla con EH Bildu de los «números» de los presupuestos.
En el País Vasco las palabras de Otegi han sido comentadas por el presidente del PNV, Andoni Ortuzar, para quien lo dicho por el dirigente de EH Bildu en Eibar es «la cara B» de la declaración sobre las víctimas de ETA.
Desde las filas socialistas en Euskadi, la secretaria general del PSE-EE y vicelehendakari, Idoia Mendia, ha afirmado que no le sorprende que Otegi hable de presos «porque, al fin y al cabo, es la mochila que arrastra».
El expresidente del PSE, Jesús Eguiguren, ha calificado de «brindis al sol» las palabras de Otegi.
Además, el expresidente del Gobierno Felipe González ha afirmado que Otegi «no tiene perdón» puesto que es «inaceptable» que quiera «cambiar presos por Presupuestos».
La secretaria general del PP vasco, Laura Garrido, ha considerado que es «obvio» que hay un acuerdo presupuestario entre el PSOE y EH Bildu que en una primera parte ha supuesto el acercamiento de presos de ETA a cárceles vascas y que ahora plantea la salida de los terroristas de las prisiones.
El líder de Vox, Santiago Abascal, ha acusado a Pedro Sánchez de pactar con Otegi unos presupuestos generales del Estado que son «los de ETA».
La líder de Ciudadanos, Inés Arrimadas, ha emplazado a Sánchez a romper «ahora mismo» con EH Bildu porque si no lo hace «estará agachando la cabeza ante el portavoz de los etarras».
Al margen de esta polémica sobre los presos, el décimo aniversario del fin de las acciones de ETA se ha visto centrado en el recuerdo a las víctimas del terrorismo, con actos institucionales tanto en el País Vasco como en Navarra.
En Bilbao el lehendakari, Iñigo Urkullu, ha expresado su deseo de que las víctimas de ETA formen «parte activa de la construcción de la convivencia y el futuro», mediante una «memoria honesta», y ha remarcado «no estamos dispuestos a olvidar».
En el mismo acto en memoria de las víctimas ha intervenido también María Jáuregui Lasa, hija de Juan María Jáuregui, gobernador civil de Gipuzkoa asesinado por ETA, y Maixabel Lasa. Ha destacado que la juventud «debe conocer el sufrimiento padecido aquí para que no se repita».
En otro acto de homenaje a las víctimas de ETA, llevado a cabo esta tarde en el Centro Memorial para las Víctimas del Terrorismo de Vitoria, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha asegurado que «a la organización terrorista ETA le venció el Estado de Derecho» y que «no hay ninguna contrapartida» por ello, ni con los presos ni con nada.
A este acto ha renunciado a acudir Covite, tras denunciar que «las consecuencias del final de ETA negociado las están pagando las víctimas con la impunidad».
En Pamplona ante el monumento a las víctimas del terrorismo, autoridades navarras y representantes institucionales han participado en un acto en el que el Gobierno Foral ha mostrado su rechazo a la violencia y ha valorado los pasos dados por la izquierda abertzale.
Además de estos actos, a lo largo de la jornada han sido muchas las voces que se han referido al décimo aniversario del fin de ETA, como el expresidente del Gobierno Mariano Rajoy, quien cree que diez años después quedan cuestiones «pendientes» como «que se pida perdón por parte de quien tanto daño ha causado» y que desaparezcan los homenajes a presos cuando salen de la cárcel.
Siete exmiembros de ETA acogidos a la vía Nanclares, entre los que figuran Joseba Urrusolo e Ibon Etxezarreta, han señalado en una carta publicada hoy que es «inaceptable» que «no se asuma la responsabilidad política» del daño causado por ETA por parte de la izquierda abertzale, a la que acusan de «esconderse» y «echar todo el peso sobre los autores de los atentados».
Para el vicelehendakari primero y consejero de Seguridad vasco, Josu Erkoreka, «sería bueno» que se esclarecieran los crímenes de ETA aún sin resolver, aunque ha reconocido que cuanto más pasa el tiempo más difícil resulta.
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