SOS Ostalaritza ha trasladado hoy sus protestas contra los cierres y sus peticiones de «ayudas reales» a la Diputación Foral de Gipuzkoa, donde cerca de 300 trabajadores de la hostelería se han reunido de forma ruidosa para reclamar el apoyo de las administraciones.
Garazi Otegi, hostelera que ha puesto voz a sus compañeros durante la protesta, ha narrado la dramática situación que atraviesan. «Que nos dejen trabajar», ha pedido.
Respecto a las ayudas han narrado que, si bien, algunos sí han empezado a percibirlas, las cuantías son exiguas. «Con 3.000 o 4.000 euros no vamos a ninguna parte», han expresado.
Igual que en concentraciones anteriores en los carteles podía leerse lemas como «Sin ingresos ni ayudas, no pagamos las facturas».
En los barrotes de la entrada del ente foral han puesto precintos amarillos y carteles como los ya citados y se ha producido un pequeño desencuentro con la Ertzaintza que no ha pasado a mayores.
SOS Ostalaritza ha dejado claro que volverá a manifestarse. Los representantes del sector consideran que la subida de los contagios no está relacionada con los restaurantes y los bares, sino con la relajación de las normas sanitarias durante la Navidad. La misma tesis que ha presentado Hostelería Gipuzkoa en el recurso contra los cierres en las zonas rojas del Covid-19.
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