“El fútbol femenino es un diamante en bruto. Es un activo con gran potencial y con inversión se pueden obtener muchos beneficios”, concluye Cristina Vega, delegada de fútbol femenino de la AFE, ante una industria que les reniega apoyo y visibilidad.
Pero, desde 2018, la compañía de análisis de datos Nielsen Sports viene señalando que a un 84% de aficionados al deporte les interesaba el deporte femenino. Y como ejemplo de este interés, según datos de la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA), las audiencias del Mundial de Canadá de fútbol femenino en 2015 tuvieron más de 70 millones de espectadores en Europa, en una industria en que la audiencia es rey. Este interés se ve reflejado también en las casas de apuestas, se puede encontrar una variedad de ligas femeninas en Sportium, como ejemplo.
Pero, en una coyuntura donde los 40 millones de dólares del sueldo de Neymar equivalen al salario anual de 1,693 mujeres de las principales ligas de fútbol femenino, en que Vicky Losada (capitana del FC Barcelona, Primera División Femenina Española) debe protestar activamente porque se le pague a su equipo los costos mínimos del deporte y, para una liga que no ha contado el apoyo de marcas de talla similar, no queda claro por qué las mujeres deportistas no pueden beneficiarse de este incremento en popularidad.
Desigualdad de género en el futbol
Ante las preguntas luego del reciente partido Costa Rica-Alemania, Neuza Back, una de las únicas tres mujeres que figuran en la lista de árbitros del Mundial de fútbol masculino en Qatar: «El prejuicio está más presente en el fútbol aficionado”, al tiempo que matizó: «Lo que necesitamos hacer [las mujeres árbitras] es un buen trabajo, tomar las decisiones acertadas dentro de la cancha. Y todo saldrá bien». La árbitra Díaz Medina también señaló con énfasis la responsabilidad de volverse un modelo a seguir para otras niñas, al «demostrarles que los sueños se hacen realidad si te esfuerzas y amas lo que haces».
Sin embargo, lo cierto es que la cobertura mediática las presenta ahora solo como la excepción a la regla: según la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), las mujeres deportistas solo representan el 4% de la cobertura mediática a pesar de conformar el 40% del total de deportistas. En cuestiones generales, este ya es un obstáculo gigante para el desempeño de una liga con todas las prestaciones de la industria. Pero este no es el único reto que enfrentan como deportistas, a costa de una problemática que suele explicarse a través la falta de espectadores y una supuesta falta de atractivo para las marcas: la brecha salarial.
(via www.estafa.info)
Mundial de futbol masculino de Qatar
La historia de las primeras árbitros mujeres que relució este diciembre de 2022 tiene ahora escala mundial. Comentando sobre esto y para matizar su histórica selección, Back aseguró que en el fútbol profesional la discriminación contra las mujeres es cada vez menos frecuente, pero que aún resta mucho por hacer en el amateur.
Pero lo cierto es que la mayoría de los focos se los llevó Stéphanie Frappart, primera mujer en dirigir un partido en la gran cita planetaria del Mundial de futbol masculino de Qatar.
Frappart fue la árbitra central en el partico Costa Rica-Alemania y sus asistentes, en el Estadio Al Bayt, fueron la brasileña Neuza Back y la mexicana Karen Díaz Medina, con un cuarto puesto encargado al hondureño Saíd Martínez. Por hoy, estas tres mujeres son parte de la selección de 36 árbitros elaborada por la FIFA para este Mundial de Qatar, donde actualmente se refuerza un régimen de tutela masculina y vestimenta decorosa para mujeres que incluye el disimulo de la cabellera, según reporta Amnistía Internacional.
El partido donde este reto deportivo y sociocultural se puso a prueba, que terminaría dándole la victoria a Alemania y, más generalmente, a la FIFA, tuvo como resultado más memorable el que Frappart, considerada la mejor árbitra del mundo en 2019 y 2020, se volvió la imagen de la igualdad de género en el futbol, de la noche a la mañana, y sin planes de ver atrás.
La victoria se queda dentro de los estadios
“Las mujeres seguimos siendo consideradas ciudadanas de segunda clase y no es solo por el dinero”, ilumina Marion Reimers, periodista deportiva de Fox Sports América Latina, que ha consagrado su carrera a abogar por el rol y la participación de las mujeres en los deportes.
La desigualdad que experimentan las mujeres toca muchas más aristas que el género, empezando por nacionalidad y clase: los países de mayor presencia en la Copa Mundial de Fútbol Femenino de Francia 2019 fueron aquellos con elevados niveles de equidad de género, según los datos de 2018 proporcionados por el Foro Económico Mundial. Si bien el tema es complejo, la figura de Frappart seguirá siendo emblemática vengan cambios reales o no, tras esta movida realizada por la FIFA para responder a un cambiante panorama socioeconómico en los deportes. Pues, según Reimers, la problemática persiste “porque las mujeres no estamos representadas en ninguna área de esta industria”.
“Son [los representativos masculinos] los que dicen que el fútbol femenino no vende, pero en verdad el problema es que, al no tener mujeres dentro de este ecosistema, sus integrantes no saben cómo venderlo, ni saben a quién venderlo”, agrega la periodista.
Movida que, según muchos, es sin lugar a dudas una victoria para la igualdad de género, pero una victoria que se mantiene solo “dentro de los estadios”.
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