Trabajadores de haurtxokos, gaztelekus y Etxarriene se concentraron ayer delante del Ayuntamiento donostiarra para denunciar recortes en el servicio y el sindicato ELA volvió a pedir una reunión con responsables municipales.
Según denuncia el sindicato en los pliegos para la prestación de estos servicios, «además de poner 400.000 euros, no dice nada en torno al centro de Alde-Zaharra, recoge una reducción considerable de horas y por si todo esto fuera poco, en caso de que se vuelva a un Estado de Alarma, expone que 38 de los 44 trabajadores tienen garantizado el puesto de trabajo pero no dice nada sobre otros seis».
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