(EFE). La Plataforma Osasun Bidasoa, formada por asociaciones y profesionales del hospital comarcal, ha pedido que se paren las licitaciones de la reforma de este centro y se ponga en marcha una mesa entre las partes implicadas para buscar un proyecto que garantice la «seguridad de los pacientes».
Esta agrupación, integrada por asociaciones de la zona y profesionales del Hospital Bidasoa, ha expresado este viernes en un acto en Irun su rechazo al plan de Osakidetza para reformar el área quirúrgica de este centro hospitalario, que implica el cierre de los quirófanos mientras duren las obras, que podrían alargarse 18 meses, y el traslado de la actividad al Oncológico.
Este colectivo ha hecho público un comunicado en el pide que durante las obras de remodelación «se atiendan las necesidades sanitarias de la población, evitando al máximo traslados innecesarios, que puedan originar trastornos en pacientes» y reclama también que «se respeten» los derechos laborales del personal.
«Es necesario que este proceso se realice con la máxima colaboración y participación de todos los agentes implicados: Osakidetza, ayuntamientos de la comarca, personal sanitario, sindicatos y ciudadanía», defiende la agrupación.
Por este motivo, pide que se «paralicen las licitaciones en marcha» y que conforme una mesa de dialogo para articular un proyecto que satisfaga a todos.
La agrupación ha solicitado una reunión con la gerencia del Hospital comarcal para que dé explicaciones por escrito sobre el proyecto y su presupuesto y también con los alcaldes de la zona ya que cree «fundamental» que los ayuntamientos tengan una participación activa en este proceso.
«Nos estamos jugando el futuro de un hospital que debe garantizar la salud de la ciudadanía de la comarca. Es fundamental que todos participemos, con responsabilidad, ya que se trata de la salud presente y futura de unos 100.000 ciudadanos«, recalca.
Trabajadores del bloque quirúrgico del Hospital del Bidasoa defienden una propuesta alternativa a la de Osakidetza que pasa por modernizar los quirófanos pero también por «ampliarlos» mediante la «creación de un edificio anexo».
Los trabajadores entienden que de esta manera se garantizaría «la calidad y seguridad del paciente mientras duren las obras» y que seguirían trabajando como en la actualidad hasta su finalización.
Por el contrario, rechazan la propuesta de Osakidetza el entender que en ese caso, durante los 18 meses que duren las obras, «no podrán asegurar ni la calidad asistencial ni la seguridad del paciente»
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