Inicio » Secciones » Información general » «Pensaba jubilarme en el Tánger. Llevo aquí toda la vida»

Hostelería

«Pensaba jubilarme en el Tánger. Llevo aquí toda la vida»

María Jesús de la Calle, más conocida como Tachús, lleva 30 años al frente del mítico bar de la calle Okendo, que ha salido a la venta por millón y medio de euros según Idealista. El 29 de este mes cerrará las puertas del local

El bar Tánger cerrará a final de mes. Foto: Santiago Farizano

María Jesús de la Calle, más conocida como Tachús, encara sus últimos doce días detrás de la barra del Tánger de la calle Okendo de Donostia, bar del que se hizo cargo hace 30 años y que ha salido a la venta. «Lo llevo fatal, me cuesta hablar», dice mientras pone cafés como todas las mañanas.

A primeros de año recibió la llamada de la propiedad del local y comenzaron las negociaciones, pero la cruda realidad de los números se impone: según el portal Idealista (Tachús no quiere dar la cifra) piden un millón y medio de euros por este bar, uno de los últimos reductos de una hostelería tradicional que se apaga en favor de otra muy distinta. «Le he dado vueltas y le sigo dando, pero simplemente no es viable», explica Tachús a DonostiTik.

En la cocina trabaja su hermana y ambas siempre han estado vinculadas al Tánger, ya que nacieron en la portería del portal Okendo 12. «Cuando el dueño de entonces murió, me lo ofrecieron. Yo tenía 23 años y antes había trabajado algunos veranos en hostelería, pero realmente aprendí aquí. En 30 años se aprenden muchas cosas».

WhatsApp Image 2024 09 18 at 09.57.56 2 1024x683 - "Pensaba jubilarme en el Tánger. Llevo aquí toda la vida"

Algunas cosas se aprenden, pero otras no las terminan de entender. La víspera de Santo Tomás del pasado año les avisaron desde el Ayuntamiento de que este verano no podrían poner terraza, una terraza que llevaban instalando quince años. «Por los mismos motivos por los que nos permitían ponerla, este verano ya no nos dejaron», explica la hostelera a DonostiTik.

Más allá de la terraza, Tachús lo tiene claro: «Se dicen muchas cosas sobre lo que pasa en la hostelería de San Sebastián. Yo no sé si el Ayuntamiento tiene la culpa. La realidad es que han llegado grupos inversores con mucho dinero y son los que compran estos negocios porque los pequeños propietarios no llegamos. Yo tengo las cifras de estos 30 años y no hay agujeros, pero no llego. Quizá habría que preguntarle a Hacienda por qué a mí me aprieta tanto y aparece un tipo con dos millones que no sabes de dónde han salido. La presión fiscal en Gipuzkoa es brutal y yo pago impuestos religiosamente. Pero luego no llegamos».

Uno de los hijos de Tachús ha terminado de estudiar y el otro está en ello. Ninguno está vinculado al bar, más allá de los veranos. Su mano derecha es su sobrina y es que el Tánger es de esos negocios familiares que ya escasean.

WhatsApp Image 2024 09 18 at 10.06.14 1024x683 - "Pensaba jubilarme en el Tánger. Llevo aquí toda la vida"

Respecto a la clientela, estos últimos años el Tańger ha vivido «una renovación». «Ha empezado a venir gente más joven. Aunque parezca mentira, la gente joven de Donostia quiere sitios especiales, no quiere clones. Los que nos hemos educado poteando por lo Viejo vemos que esto ha cambiado y buscamos locales con más esencia».

Respecto al futuro de este local con tanta solera, Tachús apunta. «Me daría pena que destrozaran el bar», dice, reflejando lo que muchos donostiarras piensan. De aquí al 29, seguro, muchos de estos donostiarras pasarán a despedirse.


11 respuestas a ««Pensaba jubilarme en el Tánger. Llevo aquí toda la vida»»

  1. Mertxe

    Mucha pena..bar temático emblemático y acogedor,me encanta y hay variedad para picoteo. No me puedo creer que desaparezca después de tantos años.Una pena.

  2. Coro

    Que pena!!! como han dicho otros usuarios,aquí todo es tirar y hacer nuevo, efectivamente vas a Italia y mantienen todo lo antiguo,bares,tiendas,puertas de los portales y hasta los timbres de latón .Es una pena que aquí nadie haga nada con la maravillosa ciudad que teníamos.Lo de la terraza vergonzoso,la hemos echado de menos.Nos están destrozando la ciudad.

  3. . M. Dolores Goya

    es una pena! habría que poner remedio para que no se siga destrozando la esencia de nuestra ciudad..,.. Es la pelea de David contra Goliat con el lavado de manos de Pilatos mirando a otro lado

  4. Larry

    La esencia de la ciudad, su alma, está desapareciendo.
    Habrá quien diga que este tipo de comentarios son propios de la nostalgia de quienes nos estamos haciendo viejos.
    Puede ser. Los establecimientos que conocieron nuestros padres también desaparecieron…pero les sucedían otros distintos pero con personalidad.
    Nos está quedando una mierda de ciudad…eso sí…muy de «insta».

    En algunos casos será ley natural y que las autoridades tampoco pueden dictar lo que hacen los propietarios con sus locales. Vale.
    Pero este Ayuntamiento se caracteriza por ponérselo muy fácil a los grandes y apretar mucho a los pequeños.
    Me acuerdo del legendario Eiger. Lo acribillaron a multas porque no podía haber gente charlando fuera del bar. Y el bueno de Alvaro se desvivía para que la gente no saliera con los vasos a hacer la tertulia. ¿Qué más podía hacer? Pues se ve que cuatro o cinco personas fumando en la puerta del bar exigía las más severas sanciones.
    Sin embargo…unas calles más abajo cientos de personas usan a diario las escaleras de SantaMaria como terraza de un par de bares de la zona con sus consumiciones y eso parece que no es problema…y sí la mini terraza del Tanger.

  5. Nera

    es una vergüenza, miren otros países, Italia por ejemplo, sus comercios no sé renuevan como aquí, se mantiene la esencia, y funcionan e maravilla
    . porque todo tiene que ser nuevo e igual, no tenemos casi ningún bar diferente, con carisma.todos iguales, co el mismo patrón para los de fuera, los de aquí,estamos acotando a tres o cuatro bares de la parte vieja en los que nos sentimos nosotros, donde te encuentras con tu gente y con quién te trata bien tras la barra. Un desastre de ciudad lo que están haciendo, no sé diferencia de cualquier otra. Todas iguales con sus diferentes características por los paisajes

  6. Antoine

    Al final las ciudades serán más grandes o más pequeñas, pero todas iguales. Si desaparecen los locales que las dotan de esencia dará igual viajar y pasear por los rincones del mundo. El Tánger guarda recuerdos de mi infancia, mi adolescencia y mi etapa adulta, en ocasiones con compañía, otras simplemente solo, pero con una atención exquisita y profesional. Como me duele.

  7. Lisa

    Es una pena, el bar “La Sra. Colombo” en la calle Alfonso VIII también ha cerrado en esta semana… es verdad, nuestra Donosti se está desvaneciendo… desaparecen bares auténticos y los ciclistas transitan por las calles sin respetar al caminante.
    Antes esto estaba prohibido. Hace poco vi a uno en la acera de la San Martín impactar a una joven mujer haciéndola caer al suelo. Se acercó mucha gente a ayudarla, mientras tanto, el ciclista agarró su bicicleta y se esfumó echando leches mientras la multitud le gritaba que parara. Alguien dijo: “No todos somos así”… por supuesto que no, pero dónde están los agentes que antes obligaban a llevar la bici a pie por la ciudad hasta conectar con el bide gorri? Ay mi Donosti…

  8. Pello

    estoy seguro que millón y medio no les va a pagar nadie, si consiguen la mitad contentos. la hostelería en el centro ya no es la gallina de los huevos de oro de hace unos años.

  9. José Miguel arroniz

    una pena que se cierra un bar típico de donostia.esta pasando lo mismo en toda la ciudad.viene un grupo inversor que le importa poco o nada lo de aquí,y pone una replica de una actividad sea la que sea bares,tiendas negocios…para implantar lo mismo que hay en cualquier parte del mundo se pierde la autenticidad de las ciudades o pueblos. mi Donostia está desapareciendo. que pena que desde el ayuntamiento y grupos vascos no se haga nada.

  10. Irene

    Toda una pena que cierren el Tanger, castizo Bar Restaurante.

    Con esa solera de la jefa y sobrina. Auténticas!
    Siempre se han dado encuentros cruzados entra la clientela habitual y los turistas de provincia disfrutando de Donosti y extranjeros.
    Soy asidua de su vino especial» perguita» y su acogedor ambiente mientras espero al bus o antes de entrar a algún concierto en los eventos de Donosti Jazz y Cinema Festival.
    Una gran perdida y lastima prescindir de un lugar tan carismático y autentico. Lo necesitamos!!

  11. María

    Es una pena. No entiendo cómo el ayuntamiento no ha dado la licencia para la terraza. Está terraza no molestaba a nadie. En la calle FelipeIV quitaron un banco, donde los mayores y no tan mayores del portal socializaran para poner una terraza y dejo de poner inconveniente de muchas terrazas porque los trabajadores de los bares no tienen la culpa. El ayuntamiento tendría que dar facilidades para que estos establecimientos emblemáticos permanecieran. Suerte

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

IV Campeonato de pintxos
Kutxa Fundazioa
Didoe