PADEP (Plataforma de Asociaciones Defensa del Patrimonio) constituida por las asociaciones Áncora, Ondare-SS, Uliako Lore Baratzak y Altzako Historia Mintegia ha presentado en el Registro del Ayuntamiento un dossier que recoge un importante número de elementos patrimoniales que considera dignos de ser incluidos en la actual revisión del Plan Especial de Protección del Patrimonio Urbanístico Catalogado (PEPPUC). Con un total de 236 edificios propuestos para su catalogación de diversas épocas, funciones (residencial, religiosos, públicos) y estilo arquitectónico es en el barrio de Gros donde se ubican la mayoría: 112 elementos. «Pese a ser una de las zonas de mayor riqueza arquitectónica de la ciudad, su indefensión es alarmante», considera la plataforma.
Recurda PADEP que calles enteras como la de Secundino Esnaola, de gran riqueza arquitectónica y expresiva, sólo cuenta con dos edificios protegidos. Para esta calle solicita la protección de todos los edificios pertenecientes a la primera mitad del siglo pasado. Y solicita concretamente la inclusión del Edificio Urumea.
Otro ejemplo destacado que propone catalogar es el estrecho edificio de la calle Zabaleta nº 8 construído en 1978, que recoge la Guía de Arquitectura de Donostia que el Colegio Oficial de Arquitectos(COAVN) publicó en 1994, y que pese a ello no está protegido. «Por paradójico que resulte existen numerosos edificios recogidos en la Guía de Arquitectura de Donostia-San Sebastián del COAVN sin proteger y si se diesen circunstancias similares al fatídico caso de Miracruz 19 podrían desaparecer», expresa PADEP.
Otro edificio cuya catalogación se considera primordial en el barrio de Gros es el del situado entre la calle Zabaleta y paseo de Colón. En concreto el número 9 de la citada calle. «Es el único caso que conserva al menos un vestigio de lo que en su día fue toda esa primera línea de palacetes y villas frente al mar».
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