El Consejo de Gobierno de la Diputación Foral de Gipuzkoa ha aprobado esta mañana una nueva normativa con más medidas tributarias destinadas a la reactivación económica tras la emergencia sanitaria del Covid-19. «Se trata de medidas urgentes que permitan incentivar la reactivación económica», explicó Eider Mendoza, portavoz foral. Estas medidas estarán especialmente destinadas a autónomos y a pequeñas o microempresas y tiene como objetivos paliar la falta de liquidez de los contribuyentes que desarrollan actividades económicas, fomentar el emprendimiento y la creación del empleo y apoyar la transformación digital del pequeño comercio.
Por un lado se ha adoptado el paquete de medidas Carry-back para personas autónomas, una medida novedosa en este caso, que beneficia a aquellas personas que demuestren en el primer semestre de 2020 su cifra de negocios ha sido significativamente inferior a la de 2019. En este caso podrán reducir de su base imponible el rendimiento neto negativo estimado para 2020. Es decir, podrán compensar pérdidas de 2020 con beneficios de 2019.
En este ámbito también entra el Carry-back para las empresas, que al igual que las personas autónomas en la próxima campaña de Sociedades, aquellas empresas que demuestren que en el primer semestre de 2020 su cifra de negocios ha sido significativamente inferior a la de 2019, podrán reducir su base imponible de 2019 un 50%, y un 75% si son microempresas o pequeñas empresas.
Por otro lado cabe destacar las deducciones por inversión a las pymes, que busca beneficiar a las microempresas y pymes y fomentar el emprendimiento. La deducción varía su intensidad en función de la tipología de la empresa: el incentivo será del 10% y de hasta 100.000 euros por inversiones en pymes; del 15% y de hasta 150.000 euros por inversiones en start-ups; y del 20% y de hasta 200.000 euros por inversiones en pymes innovadoras.
El Consejo de Gobierno también ha aprobado esta misma mañana una deducción por creación de empleo. Esta medida beneficia a todas aquellas que creen empleo y, de este modo, puedan acogerse a dicho beneficio fiscal. La normativa aprobada hoy por el Consejo de Gobierno de la Diputación eleva el límite de esta deducción de los 4.900 euros actuales hasta los 7.500 euros, por cada trabajador.
En este mismo punto de medidas destinadas a fomentar la creación y consolidación de empleo estable, se potenciarán de las deducciones existentes en el IRPF para personas trabajadoras que constituyan una empresa para la que trabajan. En concreto, se incentivará por constitución de sociedades: por un lado, los porcentajes de deducción se incrementan un 5%, y por el otro, los límites anuales suben de 1.200 euros a 6.000 euros en el caso de los hombres, y de 1.800 euros a 8.000 euros en el caso de las mujeres.
Además la Hacienda foral apostará por introducir una nueva deducción en el IRPF y en el Impuesto sobre Sociedades, destinada a personas autónomas y microempresas y pequeñas empresas respectivamente. En los dos tributos, se introduce una deducción del 30% de los gastos efectuados en 2020 para la implantación del comercio electrónico.
Y para finalizar la última medida aprobada hoy por el Consejo de Gobierno está dirigida al personal sanitario, «las entidades aseguradoras (a través de UNESPA) han creado un seguro colectivo gratuito para todo el personal sanitario, que cubre las prestaciones de enfermedad y fallecimiento como consecuencia de esta enfermedad. La medida en cuestión consiste en dejar exenta esta prestación para el personal sanitario en el Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones», explicó Mendoza.
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