Stop Desahucios ha convocado una concentración este miércoles a las 11 horas en la sede del BBVA, en la Avenida de la Libertad 36, «para denunciar la negativa del banco a firmar con Palmira, una donostiarra de 74 años, una carencia de cinco años». La plataforma teme que la mujer pierda su piso a cuenta del préstamo que pidió para un negocio su hija, ahora fallecida, y para el cual se utilizó la vivienda de la madre como aval.
Según la plataforma Palmira tiene unos ingresos de 945 euros, fruto de la cuota de 418 euros más el complemento de la RGI. Y pide al banco que mantenga la cuota de 175 euros que viene pagando.
«Debido a su situación de vulnerabilidad, en marzo de 2019 firmó con el banco una carencia por cinco años con una cuota reducida basada en el euribor más 0,25%«, condición que finalizó el pasado marzo. La mujer ha solicitado renovar la carencia por otros cinco años pero el banco se ha negado.
«Los bancos adheridos al Código de Buenas Prácticas pueden flexibilizar, si quieren, los requisitos del código. La declaración institucional de las Junta Generales de Gipuzkoa, emitida el pasado 16 de marzo a petición de nuestra plataforma, insta a las entidades financieras ubicadas en el territorio a flexibilizar los estrictos requisitos para que familias o personas en situación económica precaria puedan pagar sus cuotas ante la subida escandalosa del euribor que ha pasado del 0,8% al 4% en un año y evitar que caigan en morosidad y puedan ser objeto de una demanda de ejecución hipotecaria».
Stop Desahucios recuerda que todos los bancos, gracias a la subida del Euribor, obtuvieron el año pasado «beneficios extraordinarios».
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