(Redacción/EFE). Miles de personas se han manifestado este sábado en Donostia, Bilbao y Vitoria en defensa de una sanidad pública que consideran «en peligro» por las políticas de recortes y privatizaciones que le acusan al Gobierno Vasco de llevar a cabo.
Los manifestantes han secundado la convocatoria realizada por la coordinadora de Plataformas en defensa de la Sanidad Pública (OPA Herri Plataformak). En Billbao y Vitoria lo han hecho por la mañana y en Donostia por la tarde.
«Defendamos la sanidad pública», «No al despilfarro del Metro, recursos para sanidad» han sido algunos de los lemas escuchados en Donostia.
Entre los asistentes en la marcha donostiarra figuraban la parlamentaria de EH Bildu Rebeka Ubera y el portavoz en Juntas Generales de la formación soberanista Juan Karlos Izagirre así como la coordinadora general de Podemos Euskadi, Pilar Garrido, la juntera de esta formación Marivi Eizagirre y la concejala Arantxa González.
En representación de los convocantes en San Sebastián, Conchi Revollo ha señalado a los medios de comunicación que la realidad contradice a Urkullu cuando dice que las cosas en Osakidetza «van bien» y ha reivindicado un Servicio Publico de Salud «que es de todos».
Ha recalcado que las protestas «algo han conseguido» ya que la consejera de Salud anunció esta semana que se rebajarán las listas de espera sin derivaciones a la sanidad privada, pero ha incidido en la necesidad de «darle una vuelta al sistema».
«Listas de espera disparadas»
Antes de iniciarse la marcha en Bilbao, bajo un intenso aguacero, José Ignacio Martínez, portavoz de los convocantes, ha denunciado ·el deterioro y la degradación que sufren la sanidad pública y la atención primaria», que, en su opinión, «sigue creciendo como consecuencia de las políticas de recorte, desmantelamiento y privatización del Gobierno vasco».
«Listas de espera disparadas para ser atendido por un especialista, por un médico de familia o para ser intervenido quirúrgicamente, dificultades para acceder a una atención presencial, tiempos de atención al paciente muy insuficientes. falta de personal, especialmente de médicos de familia y pediatras, y urgencias hospitalarias colapsadas por el abandono de la atención primaria», ha enumerado.
Ha argumentado que «la denuncia de estos problemas que padece la sanidad pública no es catastrofismo, como esta semana ha dicho el lehendakari, Íñigo Urkullu, simplemente es la realidad que la ciudadanía sufrimos en nuestras carnes en el día a día y que exigen respuestas y soluciones urgentes e inmediatas».
Martínez ha agregado que «no aceptamos que la disminución de las listas de espera se haga a costa de avanzar en la privatización de servicios, aunque esta sea bajo diferentes mascaras, como las derivaciones a la sanidad privada, las peonadas o los conciertos con clínicas privadas».
«Consideramos que la salud no es una mercancía sino un derecho universal que el Gobierno vasco no está respetando. Rechazamos firmemente las políticas de colaboración público privadas porque debilitan a la sanidad pública, al mismo tiempo que favorece la expansión de la sanidad privada al destinarles una gran cantidad de recursos económicos públicos», ha agregado.
El portavoz de los convocantes ha mantenido que la solución a estos problemas que ven en la sanidad pública «viene por reforzar a la sanidad pública y por un mejor aprovechamiento de los recursos públicos».
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