Más de mil feligreses han acudido hoy a Arantzazu en respuesta a la convocatoria de Gipuzkoako Kristauak, grupo de fieles crítico con la actuación del Obispo Juan José Munilla. En la Basílica se ha celebrado una Eucaristía que ha presidido el sacerdote Jose Inazio Eguskiza y que ha sido concelebrada por otros veinte curas del Territorio según ha informado la propia agrupación.
Cabe recordar que esta cita se ha dado cuando el Obispo de la Diócesis, Juan José Munilla, cumple diez años al frente de la misma. «Diez años entre el sufrimiento y la esperanza», afirma este grupo crítico. Diez años en que se han sucedido las polémicas y los desencuentros en el seno de la diócesis donostiarra. Algunos muy sonados como los relativos al patrimonio de la Iglesia.
«El sacerdote que ha presidido la Eucaristía ha llamado a hacer un momento de silencio y orar por la Diócesis de San Sebastián, dando paso a una lectura personal de los siete testimonios que se han entregado a todos los participantes en la basílica de Arantzazu», han explicado desde la agrupación en las redes, añadiendo que la celebración ha concluido con una oración a la Virgen de Arantzazu creada para la ocasión. «Después de cantar su himno con contenida emoción, todos los presentes han irrumpido espontáneamente en un largo aplauso».
Críticas
En el comunicado que hizo público Gipuzkoako Kristauak expresaba que «la idea de Iglesia de este obispo choca frontalmente con la cultura participativa y democrática y ello nos hace dudar de su capacidad para ofrecer respuestas sensatas y evangélicas a los desafíos de nuestro tiempo (…) Difícilmente podrá nadie reconocer el espíritu de Jesús de Nazaret en una Iglesia cuyo obispo está preocupado por el dinero hasta el punto de convertir el Obispado en hotel, sin escuchar la llamada de un millar de laicos y sacerdotes de Gipuzkoa».
En la misma tesitura la agrupación denunciaba que el Obispo «no alza la voz» ante situaciones como la migración, «mientras en las fronteras de Europa y América, así como en el paso de Irun, se criminaliza la ayuda a quienes emigran y piden refugio y se prohíbe rescatar personas en el mar».
«Pero no nos rendimos. Es Adviento, un tiempo en que esperamos el Nacimiento de Jesús».
Más información:
Polémica por la «reestructuración patrimonial» que planea la Diócesis de San Sebastián
El Obispado cambia la cerradura de la Sagrada Familia para que entren los nuevos sacerdotes
La posible venta de la Sagrada Familia de Amara provoca el traslado del párroco según los feligreses
Deja un comentario