Más de un centenar de mujeres llegadas de todos los rincones de Euskadi celebró ayer en la sede del Gobierno Vasco de Vitoria-Gasteiz el Día Internacional de la Mujer Rural. El acto, clausurado por la consejera de Desarrollo Económico e Infraestructuras, Arantxa Tapia, giró en torno al Estatuto de las Mujeres Agricultoras, que fue aprobado por unanimidad por el Parlamento Vasco en el mes de octubre de 2015. Para el presente año ya será una realidad su puesta en marcha efectiva.
Es bien conocida la poca representación que ostentan las mujeres en los órganos de toma de decisión de las diferentes asociaciones y organizaciones profesionales agrarias, y uno de los objetivos a corto plazo del Estatuto es garantizar que mujeres y hombres estén presentes en la masa social y participen en estos órganos de decisión de forma equilibrada.
La administración vasca ha marcado dos fechas: 22 de octubre de 2019, día a partir del cual no se concederán ayudas ni subvenciones a las asociaciones u organizaciones profesionales, empresariales, sindicales o de otra índole que operen en el ámbito agrario y no tengan presencia de mujeres en sus órganos de dirección. Y el 22 de octubre de 2021 en que ya no se concederán si la presencia de mujeres en los órganos de dirección como mínimo es equilibrada.
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