El consejero de Hacienda y Economía del Gobierno Vasco, Pedro Azpiazu, entregó ayer oficialmente al alcalde de Zumaia, Oier Korta, la propiedad del edificio de la antigua estación tras concluir esta semana el proceso para su cambio de titularidad. A mediados de septiembre el Consejo del Gobierno Vasco autorizó dicha enajenación por el procedimiento de adjudicación directa por el valor de tasación de 161.554 euros. Korta explicó los planes que tiene el equipo de gobierno para el mismo: “Ubicar en este edificio la Oficina de Turismo y una instalación complementaria del Centro de Interpretación Algorri, además de unir en un único edificio dos usos estrechamente ligados, mejoraría la ubicación de ambos».
El inmueble está situado en la calle Mendaro Marinela 10 y se compone de un edificio principal de tres plantas y un pequeño edificio anexo de una sola planta. El edificio está clasificado como equipamental y está incluido en el catálogo municipal de patrimonio edificado de interés cultural y naturalístico.
La Administración de la Comunidad Autónoma de Euskadi adquirió en 1985 la propiedad de los terrenos por los que discurría el ferrocarril secundario de Zumarraga a Zumaia -conocido como el Ferrocarril del Urola-, y de las construcciones existentes en los mismos. Tras el levantamiento y cese de la explotación de la línea en 1989, la antigua estación Zumaia-Puerto se destinó a albergar el Centro de Salud de Zumaia, que se mantuvo hasta su traslado en 2012 a su actual ubicación, manteniéndose desde entonces en el patrimonio de esta administración con carácter de bien patrimonial y sin previsión de utilización.
Azpiazu expresó ayer que el objetivo de este cambio de titularidad obedece a la necesaria dedicación de las instalaciones públicas a los intereses de las diferentes instituciones, teniendo en cuenta la procedencia, la utilidad que se da a las mismas y beneficio para la ciudadanía. “Estoy seguro de que el municipio de Zumaia va a aprovechar de forma idónea esta antigua estación, y espero que las servicios públicos que a partir de ahora acogerá redunden en mejoras para la población del pueblo y de su entorno”.
Teniendo en cuenta la importancia que tiene esta cuestión para Zumaia, el alcalde Oier Korta, manifestó que por fin se ha materializado un deseo que los zumaiarras tenían desde hace tiempo. «El interés por este edificio no ha comenzado en esta legislatura, es una cuestión que viene de muy atrás, pero por fin hemos podido materializarlo. La vieja estación es un edificio protegido e histórico y con una ubicación inmejorable, un edificio muy valioso, por tanto, para el Ayuntamiento de Zumaia y para las y los zumaiarras. Cuando comenzamos las conversaciones para hacernos con el edificio había sobre la mesa una valoración económica, pero acordamos con el Gobierno Vasco solicitar otra tasación y ésta bajó bastante el precio, hasta los 161.554 euros».
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