Presumiblemente será en verano cuando empiece la restauración de la torre del Buen Pastor, que ya cuenta con el 50% de la financiación, 835.000 euros, que otorga el 1,5% Cultural (Ministerios de Fomento y de Cultura), y que tiene el otro 50% aún pendiente de la generosidad de los gipuzkoanos. Sin embargo el día de hoy, en que el delegado de Gobierno Javier de Andrés, el Obispo José Ignacio Munilla y la arquitecta Uzuri Larrañaga han visitado las obras acompañados por parte del equipo técnico de la obra y por periodistas, ha sido calificado por todos como «un día de alegría». Y es que la torre, tan sometida a las inclemencias meteorológicas y al aire del mar, requiere de una intervención urgente.
Hubo una restauración anterior, en los años 70, pero la gran permeabilidad de la torre, «se moja por dentro y por fuera» obliga ahora a una obra mucho más profunda que restaure su situación y la haga, además, más accesible. A falta de estudios más exhaustivos no está claro aún cuánto durará la obra.
No tiene intención la Iglesia de cobrar entrada en el Buen Pastor al revés que sí se ha hecho en Santa María, donde la deuda de dos millones y medio de euros con entidades bancarias sí ha llevado a adoptar esta postura. Tal y como ha aclarado Munilla, por ahora no hay intención de tomar esta medida, y ha aprovechado el Obispo para hacer una llamada a la generosidad de los gipuzkoanos.
Tanto él como Javier de Andrés han coincidido en que el Buen Pastor es una de las fotografías más típicas en Donostia y una visita obligada para todos los viajeros y los locales. De hecho ya no se cierra ningún día, y los mediodías son unas 300 personas las que pueden llegar a pasarse por el templo. «Es un lugar de acogida y un icono», han expresado.
La Catedral del Buen Pastor, obra neogótica del arquitecto gipuzkoano Manuel Echave, fue inaugurada en 1897. Construida en sillería con piedras procedentes de las canteras de Igueldo forma un importante conjunto arquitectónico en el que destaca su torre, situada sobre el pórtico de entrada e inaugurada en 1899, con una altura de 75 metros en forma de aguja.
Deja un comentario