La Red de Acogida Ciudadana busca voluntarios para dar clases de castellano y euskera a los migrantes que todavía no están asentados en Donostia. «Lo importante es ayudar a esta gente para que pueda salir adelante», explicó a DonostiTik Ane Mugika, voluntaria de la Red.
Techo, comida e idiomas son las bases a las que necesitan acceder los inmigrantes que llegan a Donostia en busca de un futuro mejor. Normalmente las clases de idiomas son individuales y más allá. «Se suele crear un vínculo gracias al cual los recién llegados se sienten emocionalmente más apoyados», contó Mugika.
Esta actividad lleva más de un año en marcha y también ha sufrido las consecuencias del confinamiento. «Tuvimos que suspender las clases o las realizábamos online», explicó Mugika. El perfil de quienes acceden es en su mayoría el de hombres, marroquíes, subsaharianos o argelinos. El de los voluntarios es muy variado: jóvenes, mujeres, hombres, jubilados…
La meta de todos aquellos que se ponen en manos de la Red de Acogida para aprender el idioma es saber defenderse, pero no todo queda ahí, como en el caso de «una mujer que llegó en patera. Tiene una hija y ahora ha podido acceder a la universidad. Tenía muy claro que ella no quería vivir de ayudas».
Los aprendices deben cumplir una condición: «si no aparecen en las clases por una causa justificada se les quita la plaza para que otra persona pueda aprender». Al profesor no se le pide ningún requisito específico. Las clases, gratuitas, a veces van más allá de los idiomas y en ocasiones el profesor termina enseñando matemáticas o acompañando al inmigrante al centro de salud.
Todas aquellas personas que estén interesadas en formar parte de esta actividad como voluntario pueden enviar un correo electrónico a [email protected] o llamando al teléfono 635 71 20 81.
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