Mikel disfrutó ayer de una jornada txuri urdin 100%, con victoria ante el Getafe y en el nuevo Anoeta.
El cariño de la afición realista fue suficiente para que el club abriera sus puertas al niño de Calahorra que recientemente perdió a su padre, que le había inculcado la afición por el fútbol y por los colores del equipo donostiarra.
Mikel y su amigo Gabriel estuvieron con los jugadores, recorrieron el estadio y disfrutaron del partido desde el palco en un domingo que seguro no van a olvidar.
Los aficionados agradecen el gesto del Real Unión, que jugó ayer contra Calahorra e invitó a los chavales al palco, y a la Real Sociedad, que se volcó con el pequeño aficionado.
Más información, aquí: El pequeño Mikel verá otra vez a su equipo gracias a los aficionados txuri urdin
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