La Real Sociedad ha ofrecido la Copa del Rey obtenida el pasado sábado en La Cartuja de Sevilla a los sanitarios que luchan en primera fila contra la pandemia. Este discreto acto se ha realizado en la entrada al Hospital Donostia y han acudido los capitanes, el entrenador y el presidente de la Real Sociedad.
Debido a la situación sanitaria actual, el sueño de cualquier realzale de acudir al estadio a animar a su equipo fue imposible. Después de que el equipo masculino llevara 34 años sin ganar ningún trofeo, los aficionados tuvieron que disfrutar de la previa del partido en los bares y rincones de la ciudad cumpliendo con las medidas de seguridad vigentes. Por las mismas razones, los aficionados se vieron obligados a vivir la final desde sus casas.
La Real Sociedad decidió no realizar ningún tipo de celebración por el logro obtenido y a la llegada a Donostia, el aeropuerto de Hondarribia y los accesos al centro de entrenamiento de Zubieta se cerraron de cara al público. Hoy, en cambio, en un acto celebrado hacia las 9.30 horas, los capitanes de la Real han ofrecido la copa a los trabajadores que llevan un año en primera línea contra el Covid-19.
Los capitanes que portaban el ansiado trofeo se lo han entregado a la enfermera Leire Rubio y al jefe de los servicios de la UCI, Félix Zubia, que son quienes se han encargado de levantarla bajo el emotivo aplauso de los ahí presentes.
El entrenador de la Real, Imanol Alguacil, ya tuvo unas palabras de agradecimiento hacia los sanitarios en la rueda de prensa posterior al partido, donde dio las gracias a los sanitarios por salvar tantas vidas. “De ellos me he acordado al ganar. Les dedico esta copa».
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