De largo se vistió esta pasada noche la Plaza de la Constitución para una noche muy especial y la ocasión no era para menos. El emplazamiento, uno de los más populares de Donostia, uno de los más visitados por propios y ajenos, cumplía 200 años y lo hizo con una banda sonora de excepción: el Orfeón Donostiarra, que por cierto también cumple 120 años. Un concierto memorable que atrajo a cientos de personas a la plaza y dejó fuera a otras muchas, ya que el aforo no daba para tanto.
El concierto de anoche se abrió con los txikis del orfeón, que dieron paso a los mayores con una serie de obras que son prácticamente himnos en esta tierra. ‘Festara’, ‘Ay, tierra vasca’, ‘Txoria txori’ y ‘biga, biga, higa’ de Laboa, ‘Boga boga’, ‘Maite’, ‘Gernikako arbola’… emocionaron, arrancaron aplausos y pusieron en pie a los donostiarras que tuvieron la fortuna de disfrutar del evento.
Hoy todavía continuará la fiesta en la plaza de la Constitución con el concierto de txistularis al mediodía y las danzas vascas pasadas las 13 horas. Ya son 200 años.
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