La escultura La Paloma de la Paz de Néstor Basterretxea, que estaba muy perjudicada por los vándalos y por el paso del tiempo, ha sido saneada y pintada de nuevo.
El grupo socialista en el Ayuntamiento donostiarra ha cuantificado en 29.000 euros esta actuación. «Confiamos en que la respeten», ha dicho el concejal de Mantenimiento Urbano Carlos García.
La escultura está ubicada en Sagüés después de haber pasado más de 20 años en la plaza Aita Donostia, junto al estadio de Anoeta, de donde fue trasladada en 2015.
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