La asociación Ekologistak Martxan (Ecologistas en Acción) ha otorgado sus Banderas Negras de este verano «al inexistente saneamiento de Pasai Donibane y a la intención de convertir la donostiarra isla de Santa Clara en una atracción turística».
En Donostia la isla de Santa Clara, calificada como ‘área de especial protección estricta’ por ser un lugar con una alta biodiversidad, incluida la presencia de especies amenazadas, «sufre una obra escultórica que pretende aumentar su atractivo turístico, lo que supondría un incremento considerable de visitas y, con ello, un alto impacto medioambiental», dice el grupo ecologista.
Ekologistak Martxan denuncia además la falta de un proceso de recogida y tratamiento en Pasai Donibane que hace que todo el saneamineto desemboque directamente en la bahía.
Este año se celebra además el 15º aniversario del informe Banderas Negras. Por ello Ecologistas en Acción ha elaborado un informe extra que analiza la situación de estos últimos seis años. En ese tiempo de denuncias anuales se ha otorgado un total de 284 banderas negras.
Al igual que en los años 2018 y 2019, el mayor problema del litoral español -y que este informe recoge- se centra en los vertidos de aguas y su mala depuración. 2020 es el año que mayor número de denuncias sobre vertidos y depuración ha recibido de estos últimos seis años.
El caso de Santa Clara
«Las obras de acondicionamiento del edificio comenzaron hace unos meses a pesar de que antes, desde grupos ambientalistas y sociales, habíamos denunciado públicamente este nuevo elemento de atracción turística, mostrando nuestras dudas sobre la idoneidad de la ubicación elegida, y sobre la falta de un estudio de impacto ambiental previo. La propia Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Donostia tildó esta actuación como un claro ejemplo negativo de lo que no se debería de llevar a cabo en la actualidad».
Ekologistak Martxan reclama, de nuevo, la paralización de las obras y el estudio de una nueva ubicación para la obra escultórica. «No es posible creer que una obra en la que se van a gastar millones de euros no se hace con la idea de sacar algún tipo de rentabilidad y esta solo puede venir de las visitas turísticas que se realicen a la obra, lo cual multiplicaría el número de visitas al entorno de la isla. Esto pondría en peligro las especies que lo habitan y a todo el ecosistema frágil que representa la isla».
Saneamiento de Pasai Donibane
En opinión de Ecologistak Martxan el problema del saneamiento de Pasai Donibane se engloba dentro del «grave retraso que en esta materia sufren muchas zonas de la provincia de Gipuzkoa». En este caso el saneamiento de parte del pueblo y sus alrededores va a parar a la bahía de Pasaia directamente sin ningún proceso de recogida y tratamiento. «Y todo esto a pesar de que las autoridades competentes desde la Agencia Vasca del Agua (URA), perteneciente al Gobierno Vasco, a la diputación de Gipuzkoa y sin olvidar al ayuntamiento de Pasaia, han prometido, una y otra vez, tomar medidas para resolver la situación desde hace más de 10 años».
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