El Consejo de Gobierno de la Diputación de Gipuzkoa ha aprobado la concesión al Ayuntamiento de Irun de una subvención de 6 millones de euros para sufragar la ejecución de las obras de la primera fase de la Ronda Sur, es decir la nueva variante de titularidad municipal para ir hasta Behobia por el sur de la ciudad.
En palabras del portavoz de la institución, Imanol Lasa, se cumple con el compromiso adoptado de apoyar una infraestructura “clave” para mejorar la movilidad «en la segunda ciudad de Gipuzkoa, descongestionando el tráfico y repercutiendo positivamente, por tanto, la calidad de vida» de los irundarras. Según Lasa, corresponderá ahora al Ayuntamiento «dar los pasos pertinentes» para comenzar cuanto antes con las obras, cuya duración prevista es de 16 meses. La Diputación también tiene listo ya el documento para la cesión de los terrenos de propiedad foral.
El proyecto contempla dos tramos: la primera fase de la Ronda Sur propiamente dicha, con un presupuesto de 7.048.544,04 euros, de los que la Diputación aportará 6 millones; y la glorieta y la ampliación del vial de acceso a la parcela de equipamiento en Txenperenea, con un presupuesto de 1.167.151,77 euros, que correría a cargo del Ayuntamiento de Irun.
La nueva infraestructura viaria se plantea como la primera fase -con una longitud de 690 metros- de la futura variante que permitirá ir hasta Behobia por el sur de la ciudad. Conectará por un lado con la nueva rotonda que se construirá en el enlace con la autopista AP-8, y por el otro mediante una conexión provisional con la avenida Euskal Herria cerca del convento Egiluze de la Congregación de las Hijas de la Cruz.
El trazado en planta discurrirá en paralelo a la autopista por su lado norte. Tendrá una rasante descendente en sentido Behobia con una pendiente máxima del 5,0%. Dispondrá de dos carriles en el sentido ascendente Behobia-Oinaurre y uno en el descendente, separados por una mediana de un metro.
Semienlace
A esta actuación hay que sumarle el nuevo semienlace a la AP-8, que atenderá una demanda viaria de 2.500 vehículos, cuyas obras está previsto comenzar entre diciembre y enero, con un plazo de ejecución aproximado de un año. La Diputación contempla adjudicar los trabajos cuanto antes, y financiará el proyecto en su totalidad (9,3 millones) a través de la sociedad foral Bidegi. «En conjunto, vamos a aportar más de 15 millones para estos dos proyectos que están completamente ligados», ha destacado Lasa.
La primera fase de la Ronda Sur permitirá comenzar a exprimir el potencial del citado semienlace, mejorando la accesibilidad del núcleo urbano de Irun, al bordearlo en paralelo generando nuevos accesos a la trama urbana, si bien su potencialidad plena «se logrará una vez el Ayuntamiento desarrolle las restantes fases de la Ronda Sur», según la Diputación. El ente foral asegura que propiciar esos accesos por el sur del casco urbano redundará en beneficio de la red de carreteras de Gipuzkoa, en especial de la GI-636 o antigua N-1, que tendrán menos tráfico.
Bonificaciones en la AP-8
En paralelo, la Diputación asegura que ya trabaja en los cambios necesarios para poder ofrecer a futuro descuentos a los usuarios habituales del tramo Irún-Ventas-Behobia en la AP-8. Desde el primer desplazamiento de ida y vuelta habrá un descuento del 50% y, a partir de 20 desplazamientos de ida y vuelta, otro del 80%. Para acceder a estas bonificaciones será necesario tener el dispositivo de telepeaje Abiatu. El organismo adopta así un nuevo criterio en el uso de la autopista en todo el tramo de la localidad fronteriza, otorgando «un tratamiento de variante al tramo desde Ventas a Behobia».
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