Mala Gissona, la firma cervecera gipuzkoana, estará mañana presente en la final del Campeonato Nacional de Cervezas que celebra su octava edición. Este año el concurso ha recibido más de 400 propuestas de cervezas de 60 fábricas cerveceras. Mañana será cuando el jurado, compuesto por 35 expertos y expertas procedentes de 15 países, dará a conocer los premiados. La entrega de premios se celebrará en la fábrica Siesta Brewing Co situada en Burgos.
Si algo anima al equipo de Mala Gissona a presentarse, año tras año, al campeonato estatal son los buenos resultados. De hecho en todas las ediciones han obtenido medallas.
Concretamente en la última edición fueron 4 las medallas que se trajeron para casa. Para Manu Murillo, socio fundador de Mala Gissona, «esta es una buena manera de mostrar la calidad del producto gipuzkoano y colocar así a la cerveza vasca en lo más alto del panorama estatal como ocurre con otros productos como la sidra o el txakoli».
Manu destaca la ilusión con la que se presentan en esta edición porque considera que el evento es un referente a nivel profesional en todo el Estado y desde la cervecera gipuzkoana se ha hecho un buen trabajo para mantener tanto la calidad de la línea base como la realización de nuevas cervezas constantemente posicionándose así en el mercado nacional.
Euskadi con potencial
Mala Gissona ha sido una de las primeras cerveceras en apostar por el mundo de las lager craft. Lager es uno de los tipos de cerveza más consumidos. La Ipa, otro estilo de cerveza más relacionado con las artesanas ha venido siendo la categoría donde más se ha innovado, sin embargo, Mala Gissona ha apostado por innovar en las lager con propuestas muy creativas, bien lupuladas, o turbias realizando este trabajo de innovación desde hace años.
Mala Gissona nació en 2014 cuando dos amigos, Iban y Manu, emprendieron una aventura en el mundo de la cerveza en una fábrica de Oiartzun. Años después han logrado situar su producto en mercados como el francés, el inglés, finlandés o el portugués creando más de 30 variedades de cerveza,. Actualmente está muy presente en toda Euskadi, Navarra e Iparralde.
El origen del nombre
Mala Gissona recoge el espíritu de los antiguos balleneros vascos en sus largas campañas en el Atlántico Norte. Una personalidad forjada «a mar y viento» que dejó una profunda huella. Los balleneros vascos faenaron en las costas de Islandia desde, al menos, el año 1412. El vínculo entre estos pescadores y los habitantes de la isla dio lugar a un «pidgin» (lengua común) que fusionaba el euskera y el islandés. Aún se conserva un documento de la época con 745 palabras en «vasco-islandés». Es el diccionario más antiguo de una lengua viva en Islandia. «For ju Mala Gissuna». Esta frase procede de este documento original y significa «tú eres un Hombre Malo». Podría ser una forma básica usada por los islandeses para referirse a los balleneros vascos que llegaban a sus costas.
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