«En los últimos años, sobre todo tras el cierre de la calle San Martín, la Avenida de la Libertad se ha convertido en una improvisada y caótica estación de autobuses urbanos e interurbanos en la que se crea un efecto embudo en la intersección con la calle Urbieta. Además, tiene un firme muy deslizante que la hace ser especialmente peligrosa, sobre todo en los días de lluvia». El Real Automóvil Club Vasco Navarro advierte en un comunicado sobre la «conversión» de la Avenida de la Libertad en estación de autobuses.
Para el RACVN resulta necesario establecer un punto de conexión o intercambio entre líneas interurbanas y líneas urbanas para minimizar el tráfico de vehículos de grandes dimensiones en el centro de la ciudad. «Para ello, el RACVN propuso hace un par de años recuperar las dársenas de la antigua estación de Pío XII, pero el Ayuntamiento rechazó la propuesta».
Opina el Real Automóvil Club que el lugar natural para establecer un intercambiador debería centralizarse en la Estación de Autobuses de la ciudad. Sin embargo, algunas de sus características la han convertido en un lugar inadecuado. «Aunque la estación de autobuses es relativamente nueva, se ha quedado antigua y pequeña para el flujo de autobuses. Además, el acceso a la misma no resulta una solución, sino un problema añadido».
El RACVN insta a las administraciones a que tomen en consideración y estudien dos de sus propuestas para minimizar las afecciones al tráfico y garantizar el acceso y salida fácil y cómodo a las personas: el intercambiador de Pío XII y los parkings disuasorios.
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