La Diputación ha señalado que de acuerdo con las recientes inspecciones y entrevistas realizadas con las usuarias del centro Bidean se puede afirmar públicamente que en la actualidad “no se están dando ninguna de las deficiencias incluidas en las quejas”, al tiempo que garantiza que la atención que se presta en este centro es “la adecuada”. La diputada ha adelantado que “ya se está en contacto con varios ayuntamientos para buscar una nueva ubicación” del centro y se trabaja en “la prevención de futuras deficiencias”. La ubicación actual no se conoce por la protección de las usuarias frente a sus agresores.
No obstante la representante del ente foral ha afirmado que va a investigar “hasta el final” las quejas presentadas al Ararteko por parte de un grupo de ex usuarias del centro Bidean.“Todo ello con el fin de que las mujeres en situación o en riesgo de violencia no duden ni un instante en dar ese paso para recibir un apoyo y una atención de calidad en esos momentos tan complicados”, ha subrayado la diputada Maite Peña, quien ha comparecido esta tarde en Juntas Generales para responder a las preguntas realizadas por los grupos junteros de Podemos y EH Bildu.
Peña ha recordado que “hay un buen sistema de atención con unos buenos recursos y unas buenas profesionales”. Ha añadido que es un tema que hay que tratar con “exquisita atención y discreción” y que lo que más le preocupa es, además “del contenido de las quejas”, que las mujeres que puedan ser en estos momentos víctimas de violencia machista en sus domicilios “no se atrevan a dar el paso” de acudir a un servicio de atención público “por los problemas que hayan leído en los medios de comunicación”.
Con respecto al expediente informativo abierto el 8 de mayo, éste consta de cuatro apartados: “Adecuación del centro desde los puntos de vista de seguridad y accesibilidad, adecuación del centro desde el punto de vista de salud e higiene, idoneidad de la atención prestada, así como posibles déficits de recursos económicos y de alimentos”.
Retraso en el proceso
Peña ha explicado que se da una circunstancia que “puede retrasar todo el proceso”. “Y es que, aunque resulte paradójico –ha dicho- las usuarias reclamantes no presentaron las quejas a este Departamento o al Centro sino que las han presentado directamente al Ararteko. Nosotros hemos pedido al Ararteko que nos facilite las mismas para poder investigar los hechos y los periodos denunciados. Pero lógicamente este no nos puede remitir las quejas sin la conformidad de las usuarias reclamantes, motivo por el cual estamos a la espera. Lo que no queremos es cerrar el expediente sin poder entrar a fondo en el asunto y por eso hemos creído más oportuno prolongar la fase de instrucción hasta disponer de esta información”.
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