El 19 de octubre de 1972 echó a andar Kresala Zinekluba con una película de Buñuel, ‘Ensayo de un crimen’. La misma película que podrá verse este miércoles 2 de junio en Tabakalera de la mano de la programación Nosferatu. «Falta un año y medio para el 50 aniversario del cineclub, pero nos parece que éste puede ser el mejor punto de partida para la celebración», explicó Ander Gisasola para DonostiTik. Por eso habrá invitados de lujo presentando la película: Fernando Mikelajauregi y Juan Berasategi, los «escuderos» de Luis Bergua, fundador de Kresala Zinekluba, que no podrá acudir pero seguro que está pendiente del evento.
Mientras saborean de antemano esta cita, los miembros del equipo de Kresala Zinekluba ya trabaja en el aniversario de 2022 que promete ser potente. «Hay mucho programa aún sin cerrar, pero tenemos cosas en la cabeza: películas mudas con música en directo, por ejemplo, y ya hay algo atado en el Teatro Principal. También queremos organizar proyecciones por distintos puntos de la ciudad. Y es que el 50 aniversario de Kresala Zinekluba tiene que ser una celebración de los cinéfilos y del cine de autor».
Los miembros de Kresala Zinekluba tienen claro que un cineclub es sobre todo una comunidad, un grupo de amigos que elige con cariño una película y la comenta después de verla. «Kresala es una estructura para eso», añadió Gisasola, que aboga por aprovechar el aniversario para poner de relieve esa idea y llegar más lejos.
Irán más lejos aprovechando dos circunstancias: el encuentro entre cineclubs vascos hace dos años, que dejó muy buen sabor de boca, y que en 2020 fue el 50 aniversario del cineclub Padre Feijoo en Orense y estaba programado un encuentro de cineclubs españoles que no pudo celebrarse por la pandemia. «Así que aprovechamos y cogemos nosotros el testigo«, contó Gisasola en una nueva pincelada de lo que preparan para el año que viene.
Por supuesto el 19 de octubre de 2022, que es exactamente cuando se cumplen los 50 años de la primera proyección, habrá «algo gordo» y ya se trabaja en un documental. Habrá que esperar… pero está todo en camino.
La tarjeta Amigo y premios K
En 50 años el equipo de Kresala Zinekluba ha ido renovándose como es natural. Hoy en día son siete personas las que trabajan a piñón fijo. «Tenemos satélites alrededor que ayudan mucho porque lo cierto es que éste es un trabajo voluntario que se lleva mucho tiempo».
Detrás del equipo está la legión de fans que no falla. En este punto Gisasola destaca que los cinéfilos donostiarras tienen mucha suerte y no solo por el papel que desempeña Kresala: «En Donostia tenemos la suerte de que Sade proyecta mucho cine de autor y hay versión original. Otras ciudades más grandes no tienen esa oferta«.
Precisamente esa fidelidad de los aficionados ha llevado a Kresala Zinekluba a sacar muy recientemente la tarjeta Amigo. «A raíz de la pandemia y la obligación de numerar los asientos vimos que a la gente le gusta sentarse en determinada butaca. Por otro lado, aunque vendemos online, mantenemos una venta física al mes y eso nos demostró que hay cinéfilos que compran tranquilamente las entradas para todo el mes. Así que hemos sacado un bono para toda la temporada, la tarjeta Amigo de Kresala, que permite tener la butaca reservada para todas la sesiones». Tiene varias modalidades, se puede comprar en la página web y como siempre la respuesta ha sido muy buena.
Por otro lado hay otra novedad para los próximos meses. También con ese afán por ampliar la red de amigos han nacido los premios K (en homenaje a los premios don Quijote que entrega la Federación Internacional de Cineclubs, pero con ‘k’).
Pues bien: a partir de septiembre el festival AnimaDeba de Deba, Donosskino de San Sebastián, Amua de Hondarribia, el Festival Internacional de Cine en Lengua de Signos de Tolosa y el Festival Zinetika se reunirán para dar un premio al mejor corto. Y con las obras ganadoras se organizará una ‘gira’ por los cineclubs de Gipuzkoa.
De Wong Kar-Wai a Bresson
Este curso que termina se despide a lo grande. Hoy se cierra la retrospectiva del cineasta Wong Kar-Wai y después del miércoles, con su ‘Ensayo del crimen’ y el punto de partida del 50 aniversario, el 15 se estrenará en Euskadi ‘Ven y mira’, película rusa de 1985 que encargó la URSS y será proyectada en una versión restaurada. El 22 ‘Calabuig’, de Berlanga, que resultó la película elegida por el público entre varias opciones.
Dice Gisasola que prosperan y es cierto. «Estamos programando mejor, más diverso y estamos contentos».
Para el curso que viene han anunciado ya la retrospectiva de Robert Bresson y hay especial ilusión en ese ciclo: «Las dos retrospectivas que habíamos hecho hasta ahora estaban en el mercado. Pero ésta la hemos organizado nosotros. Buscar las películas, ver quién tiene los derechos… es mucho trabajo y también mucha satisfacción».
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