Hasta el 9 de febrero la visita al Aquarium donostiarra encierra sorpresa final con la colección ‘Karelia’ al término del recorrido. Tytti Thusberg es una creadora y diseñadora finlandesa de moda sostenible. Una pionera en este ámbito que empieza a ver, ahora, que la sociedad entiende por fin que los términos ecología y moda deben ir de la mano. «La industria de la moda es la segunda más contaminante de planeta», recuerda, «y yo entiendo la moda como algo sostenible, atemporal, duradera y hecha aquí».
No hay nada que no esté reciclado en esta colección que ofrece doce conjuntos y varios bolsos hechos con cinturones de seguridad. Las prendas tienen su punto de partida en botellas de plástico trituradas, cuyos filamentos se mezclan con lana latxa local «que históricamente siempre ha sido muy difícil de trabajar».
Thusberg reconoce que se trata de un proyecto piloto que está en fase de experimentación. «Hay que perfeccionar la tela porque he observado que se deshilacha. De hecho he aprovechado esto en un conjunto para simular una vainica».
Su propuesta se denomina ‘Karelia’ y el nombre no es casual. Karelia es la región de donde procede su familia, en Finlandia, que actualmente pertenece a Rusia. Un origen históricamente muy relacionado con el drama de los refugiados, tan de actualidad. Así que esta exposición mezcla mar y sostenibilidad con mención expresa a los refugiados. Temas que hoy en día sacuden (o deberían) la conciencia mundial. Por cierto que Thusberg encuentra muchos puntos en común entre la cultura de su lugar de origen y Euskadi.
Estas prendas ya han estado sobre la pasarela y también han sido expuestas en otros centros. Detrás del trabajo de esta diseñadora hay entidades que investigan el tratamiento de la tela como la Escuela de Ingeniería de la UPV y la empresa Eko-REC de Andoain. Además de una empresa de Barcelona especializada en tejidos sostenibles. También ha colaborado la Diputación de Gipuzkoa.
«Ha sido un trabajo complicado y hay que investigar más, pero vamos a dominar esta tela», asegura la diseñadora con convicción, consciente de que el futuro de la moda pasará por el camino de la sostenibilidad.
La exposición incluye un ‘fashion film’ de Gosho y fotografías hechas en Kutxa Kultur de Tabakalera por el fotógrafo Santiago Farizano.
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