Sos Racismo, la Red de Acogida Ciudadana, Arrats, Caritas… las ONGs se han movilizado y piden soluciones para las cerca de 60 personas que han sido desalojadas del Infierno en las últimas horas en una operación anunciada desde hace meses y muy criticada por las asociaciones y por la oposición en el Ayuntamiento porque llega en plena pandemia y con toque de queda. «Lo paradójico es que ayer pasadas las 23 horas decía la Ertzaintza a algunos de los ocupantes de la fábrica que cogieran sus cosas y se fueran. Y algunos lo hacían. A una hora en que se supone que no debe haber nadie en la calle«, explicó para DonostiTik Olaia Duarte, concejala de EH Bildu.
Esta mañana pasadas las 6 horas el operativo policial se ha desplegado, una vez se ha decidido desalojar los pabellones de la fábrica pero no las viviendas donde aún habitan decenas de personas. No se han producido altercados y según la Ertzaintza solo ha habido una detención, pero está relacionada con el quebrantamiento de una orden de alejamiento y no con este dipositivo.
Itxaso Agirre Barandiaran, de la Red de Acogida Ciudadana y de Sos Arrazakeria, es una de las personas que ha seguido de cerca el proceso y ha intentado establecer contacto con Servicios Sociales del Ayuntamiento donostiarra. «El Ayuntamiento dice que no es de su competencia», explicó Agirre Barandiaran, que pese a todo se ha dirigido este mediodía con una veintena de afectados al Consistorio, donde a las 14 horas han protagonizado una concentración con la petición expresa de reunirse con la concejala de Acción Social.
«No hay plan B y no hay recursos porque los actuales ya no aceptan a más personas. No lo hacen ni el Abegi Etxea ni el Gaueko. 60 personas más que se van a la calle en Donostia en plena pandemia», denuncia Olaia Duarte, quien ha narrado que habló anoche con la concejala de Acción Social y ésta respondió que no tenía conocimiento de la operación y que no es de competencia municipal porque se trata de pabellones privados. «Pero nosotros creemos que es de competencia municipal y también foral y que en esta situación deberían tener un dispositivo preparado por el bienestar comunitario«.
«A las puertas del invierno y con la pandemia recrudeciéndose queda en evidencia la falta de capacidad de nuestras instituciones para dar una respuesta a las situaciones de exclusión severas que ocurren en nuestro territorio», ha expresado Elkarrekin Donostia a través de las redes, uniéndose a la exigencia a las instituciones de que no dejen a estas personas sin hogar durante la pandemia.
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