El alcalde de Donostia Eneko Goia ha defendido hoy que ‘La Sirena’, conocido como ‘local del frío’, es el «último» recurso destinado a las personas sin techo que viven en Donostia y ha añadido que la polémica sobre sus aperturas o cierres, dependientes de los anuncios de heladas, debe ser entendida en «un contexto» asistencial que en total destina 181 plazas a quienes duermen en la calle. Cabe recordar que tanto la Red Ciudadana de Acogida de esta ciudad como EH Bildu y Elkarrekin Donostia han pedido al Gobierno municipal que mantenga el servicio abierto.
Cuestionado al respecto, Goia ha querido dejar claro que, en Gipuzkoa, el de Donostia «es el único Ayuntamiento que cumple con la Ley de Servicios Sociales» y ha añadido que «en Hernani hace el mismo frío que en San Sebastián».
El alcalde ha recordado que en el Territorio faltarían a día de hoy 179 plazas destinadas a las personas sin hogar mientras en Donostia hay 181 «abiertas todo el año». Y ha incidido en que los donostiarras equivalen solo al 27% de la población de Gipuzkoa.
Por otro lado Goia ha recordado que 2019 se puso en marcha una línea especial de ayudas para que las personas en situación precaria puedan alquilar una habitación, algo que hicieron 114 de ellas el pasado año.
Respecto al protocolo de la Sirena, lleva vigente «al menos» diez años y según lo dicho por Goia no se contemplaría la posibilidad de modificarlo.
En los días en que ha estado abierto han dormido allí entre 37 y 60 personas por noche.
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