(EFE). El Gobierno Vasco volverá a declarar la emergencia sanitaria una vez que el Tribunal Supremo ha avalado la posibilidad de exigir el pasaporte covid en Euskadi.
En una comparecencia antes de que conocerse al aval del alto tribunal al pase covid, la consejera de Salud, Gotzone Sagardui, y el portavoz del Gobierno Vasco, Bingen Zupiria han explicado que tras la decisión del Supremo se declarará la emergencia «cuanto antes» para poder así reactivar la ley vasca antipandemia y las restricciones que esta contempla.
Esta norma permitió en la anterior emergencia sanitaria -que terminó el 7 de octubre- limitar los aforos en hostelería, comercio y eventos culturales, impedir el consumo en barra en los bares y limitar el número de personas por mesa en estos locales, entre otras medidas.
No permite sin embargo medidas que limiten derechos fundamentales como la movilidad, lo que impediría decretar cierres perimetrales o instaurar toques de queda.
Sagardui no ha adelantado ninguna de las posibles restricciones que se contemplan ahora para frenar la pandemia: serán las que legalidad «permita» -y para ello hay que saber el «marco jurídico completo» que habilita el Supremo- y las que la situación «requiera».
Por el momento no se conoce el contenido completo de la sentencia dictada por la Sección Cuarta de la Sala de lo Contencioso Administrativo del alto tribunal ni el voto particular emitido por el magistrado Antonio Fonseca-Herrero, por lo que el Gobierno Vasco esperará a recibir la notificación oficial del fallo para detallar las nuevas medidas.
«Mientras tanto se deben cumplir las restricciones ya vigentes», ha recalcado la consejera, que ha dicho que volverá a plantear en el Consejo Interterritorial de Salud que la mascarilla vuelva a ser obligatoria en exteriores en toda España.
El anuncio de que Euskadi recuperará la declaración de emergencia sanitaria llega después de que ayer se detectaran 1.274 nuevos contagios, una cifra que no se alcanzaba desde finales de julio, y la incidencia acumulada por 100.000 habitantes en 14 días subiera hasta los 509,7 casos, un valor que retrotrae a la situación de mediados de agosto.
Además este lunes 60 personas ingresaron con covid en los hospitales hasta llegar un total de 229 pacientes, de los cuales 49 están en la uci.
Este aumento de la presencia asistencial ha llevado a Osakidetza a «reorganizar su actividad», lo que obligará a posponer operaciones no graves que ya habían sido retrasadas por la pandemia, pero que se estaban recuperando desde septiembre con un «esfuerzo añadido» que ya no se podrá mantener. La consejera ha garantizado en todo caso que se seguirá «atendiendo todo lo urgente y oncológico».
Ha sido necesario también pasar al escenario 2 del plan de contingencia contra la covid, de manera que se han ampliado a 251 las camas uci en los hospitales vascos.
El 20 % de estas unidades de críticos las ocupan ahora pacientes con covid, pero los responsables creen que se avecina una «época complicada» con otras patologías que también podrían terminar con ingresos en la uci, por lo que se ha visto necesario ampliar estas camas.
«Tenemos todavía mucha capacidad de respuesta», ha asegurado la consejera, quien ha reconocido que los «ajustes» en Osakidetza también se dejarán notar en la Atención Primaria, ya que aunque se mantendrá la presencialidad el aumento de casos de covid conllevará un incremento del trabajo relacionado con su seguimiento y control.
Sagardui ha informado de que por el momento no se ha detectado en Euskadi ningún caso de la variante ómicron, aunque «esto puede cambiar mañana». La covid ha demostrado durante la pandemia que es «imprevisible», por lo que tampoco es posible «anticipar cuándo se dará un cambio de tendencia» en la actual curva alcista de los indicadores. E
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