(EFE). Algunos de los más destacados autores vascos han suscrito un manifiesto que, bajo el título «Lo que solo se aprende con la literatura», reivindica «el valor del libro» y se presenta como «el punto de partida, el arranque» de otras actividades.
«En tiempos convulsos, cuando nos sentimos a la deriva, la literatura siempre da algunas coordenadas. La literatura nos pone ante el espejo y nos pregunta: ¿Somos libres?«, dice el texto que suscriben, entre otros, Anjel Lertxundi, Felipe Juaristi, Juan Kruz Igerabide, Harkaitz Cano, Katixa Agirre, Uxue Alberdi, Jon Bilbao e Itxaro Borda.
Iban Zaldua, Eider Rodríguez, Txani Rodríguez, Karmele Jaio, Edorta Jiménez, Miren Aguar Meabe, Castillo Suárez y Eli Tolaretxipi son otros nombres de los 76 que se han adherido al manifiesto, impulsado por la Fundación Meettok, entidad adscrita a la editorial donostiarra del mismo nombre.
«El principal objetivo del manifiesto es promover y prestigiar la lectura de libros de literatura. El mensaje suscrito por decenas de escritores no es un fin en sí mismo, queremos que sirva de motivación para que surjan diferentes opciones de fomento de lectura de literatura entre los adultos, y seguramente harán falta iniciativas no del todo convencionales», señalan los promotores en una nota.
Por ello el texto se presenta como «el punto de partida» de nuevas actividades.
En su defensa de la literatura, el manifiesto subraya que «toda lectura deja una marca, aunque en el momento no la sintamos». «Porque la literatura nos despierta y sacude, enciende la mente. Es combustible y es fuego», recalca.
Señala que la literatura «debe estar abierta a todo el mundo, sin ningún freno» y, aunque «tal vez leer no nos haga mejores personas», asegura que dejará en quien lee «indicios de la amplitud y la diversidad del mundo».
«Asimismo, compartir lo leído con amigas, conocidos, compañeras de clase, miembros del club de lectura o en las redes sociales nos dará tanto o más placer que la propia lectura: hablar sobre libros es una manera de reescribirlos. Y la historia de la literatura es la historia de la lectura; avanza más allá de las quemas públicas, de la censura y del ruido y la furia de nuestros dispositivos electrónicos», enfatiza.
«Puede que no seamos muchos, pero no sólo los números cuentan. Formamos un ecosistema bien articulado: lectores, escritoras, traductoras, editores, críticos literarios, libreras, bibliotecarios… Nos une la literatura. Por eso queremos consolidar y prestigiar esa red, reivindicar el valor del libro. Porque lo que nos enseña la literatura solo se puede aprender leyendo literatura», añade.
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