La banda marrón afecta ya al 33,15% del pino insignis de Euskadi y si bien las tres provincias tienen el problema es precisamente Donostialdea la más afectada con un 70% de estos árboles enfermos. Le siguen muy de cerca Tolosa (62,6%), Urola Costa (52,7%), Bajo Bidasoa (49,8%)… Gobierno vasco y las tres diputaciones han pedido hoy tranquilidad al sector forestal y en una comparecencia en Donostia han hablado de «medidas excepcionales» para hacer frente a una «situación excepcional». En principio ya han pedido permiso al Ministerio para el tratamiento aéreo con óxido cuproso en la primavera de 2019.
La consejera del área Arantxa Tapia ha estado acompañada por los representantes de los tres territorios (desde Gipuzkoa la diputada Ainhoa Aizpuru) durante una comparecencia en la sede del Gobierno vasco, en la calle Andia. Allí han insistido en «la relevancia del sector forestal y de la madera» y han pedido tranquilidad.
El plan que han presentado contempla tres puntos: generación de conocimiento sobre la enfermedad, medidas para hacerle frente y recuperación del sector.
Según lo previsto el tratamiento aéreo con óxido cuproso será en primavera, tras recibir el visto bueno del Ministerio, trámite obligado, y además está programado importar plantas resistentes a esta enfermedad y se reforzarán las medidas preventivas en los planes de ayudas forales. También se elaborará una guía que recogerá las prácticas recomendadas para estos casos.
Respecto a las cortas se intensificarán los planes de ayuda forales para incentivar la corta de masas muy afectadas, se designarán zonas de cortas prioritarias y áreas de corta para limitar su expansión de la enfermedad y se organizarán áreas de almacenamiento de madera cortada para su venta paulatina.
En lo que se refiere a la recuperación del sector, último punto del plan, se va a experimentar con especies que sean resistentes a la enfermedad e interesen desde el punto de vista comercial. Se promoverá la utilización de semillas con origen de garantía y se realizarán proyectos de caracterización de diversas especies. Asimismo se diseñarán proyectos para hacer plantaciones experimentales en los montes y se reforzarán las ayudas para talar las zonas enfermas.
Llevar a cabo el plan supondrá una reorganización del sector forestal de las tres provincias, tanto en lo que se refiere a personal como a medios, han afirmado los presentes.
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