Agentes de la Ertzaintza detuvieron anteayer a un varón por robar, junto a un cómplice, en un piso de Irun. Abordaron a su propietario cuando iba a entrar en su casa y posteriormente le amenazaron para que les dijera donde tenía la caja fuerte. El arrestado es un antiguo empleado de la empresa de la víctima.
Alrededor de las 13.45 horas un particular solicitó presencia policial en un inmueble de la Avenida Gipuzkoa ya que se habían oído gritos procedentes de un piso y temía que se estuviera cometiendo algún delito.
Las dotaciones policiales desplazadas a esta dirección realizaron comprobaciones en diversos pisos y en uno de ellos les abrió la puerta un varón de edad avanzada que les explicó que, minutos antes, cuando se disponía a entrar a su domicilio, fue abordado por dos encapuchados que le introdujeron a la fuerza dentro de la vivienda. A continuación le amenazaron para que les dijera donde estaba la caja fuerte, pero la víctima les aseguró que no tenía caja fuerte, por lo que los desconocidos lo metieron en una de los habitaciones mientras ellos registraban la casa. Finalmente los ladrones se marcharon tras sustraerle el dinero que llevaba en la cartera.
A pesar de que llevaban la cara cubierta, este hombre creyó reconocer a uno de los atracadores y pensaba que podía ser un antiguo empleado de su empresa familiar. El sospechoso fue localizado pasadas las 15.30 horas y se procedió a su arresto. La investigación sigue abierta con el fin de localizar y detener al segundo implicado en este delito.
El detenido, de 38 años y con amplios antecedentes policiales, ha sido puesto hoy a disposición judicial una vez finalizadas las diligencias policiales pertinentes, y ha sido decretado su ingreso en prisión.
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