El portavoz de Elkarrekin Podemos en el Ayuntamiento de Donostia, Victor Lasa, ha explicado que la llegada de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) debería propiciar un cambio verdadero de la movilidad como ya lo supuso en muchas ciudades de Europa “que llevan la delantera” como Londres, Amsterdam, Madrid, Copenhague o Pontevedra.
Las principales propuestas presentadas por Lasa son la ampliación de la ZBE a Gros y ambas orillas del
Urumea desde el puente de Mundaiz, la prohibición de entrada a vehículos que no tengan distintivo CERO o
ECO, y que la segunda fase se implante a los 18 meses del inicio (en vez de los tres años propuestos por el
gobierno).
Durante la primera fase, Lasa propone que sólo los vehículos B y C que cumplan Euro 4 puedan
acceder, y sólo los Euro 5 y 6 a partir de la segunda fase. Se haría una excepción sólo con vehículos B y C
de residentes durante los tres primeros años.
Lasa insiste en la importancia de reforzar el transporte público y la disponibilidad de bicicletas y bidegorris
para complementar estas restricciones. “La manera de mejorar la movilidad es haciendo que el uso del
vehículo privado sea la ‘peor opción’ para la ciudadanía. Que sea más fácil, rápido y agradable utilizar
cualquier otro método, desde el bus hasta caminar, pasando por la bici.
También apunta que las restricciones deben de ir acompañadas de excepciones que faciliten la vida de los
residentes. “La ZBE debe trabajar en beneficio de los residentes, y no tanto de los visitantes. No se trata de
hacer una zona para que los turistas se paseen libremente con sus coches eléctricos, sino de que la mayoría
vivamos mejor, reconociendo las necesidades de movilidad y las excepciones necesarias”. Más sobre la Zona de Bajas Emisiones, aquí.
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