Son 210 elementos nuevos, casi de ellos 150 villas, los que se sumarán al catálogo del PEPPUC (Plan Especial de Protección del Patrimonio Construido) como resultado del proceso de renovación en que trabaja el Ayuntamiento donostiarra, y que será aprobado definitivamente por el pleno del 25 de marzo. La concejala Nekane Arzallus y el director de Urbanismo Jon Chávarri han presentado hoy el nuevo documento, que pasará a contar con 1.310 elementos protegidos.
Una de las novedades importantes es que se va a crear un Consejo Asesor del Patrimonio que flexibilizará la entrada o salida de elementos en el catálogo y que estará formado por «expertos» y por representantes políticos.
«Este consejo será un órgano participativo y estará integrado por personal altamente cualificado así como con una representación multidisciplinar en la que podrán tener cabida, entre otros, personas de instituciones universitarias, órganos colegiados o colectivos de profesionales de la arquitectura, así como asociaciones patrimonialistas», han explicado Arzallus y Chávarri, si bien el asunto está todavía por definir.
Ambos han recordado también que la reforma del PEPPUC recibió 30 alegaciones durante el proceso de exposición pública, principalmente por particulares afectados por la catalogación de su villa, así como por asociaciones de defensa del patrimonio de la ciudad.
Elementos catalogados
Chávarri ha explicado que la inclusión de elementos viene dada, en parte, porque cambian los criterios que rigen el catálogo y ahora se tienen en cuenta el valor paisajístico que pueden tener las villas, por ejemplo, y su interés colectivo.
Precisamente las 150 villas que se incluyen con esta revisión son en su mayoría de las primeras décadas del siglo XX y están situadas en diversas zonas de baja densidad y en conjuntos como Ategorrieta-Ulia, Intxaurrondo, Aldapeta, Duque de Baena, Calzada de Egia, Paseo del Faro o Paseo de la Fe. Asimismo se incluye el conjunto de 28 villas del Paseo de Hériz, así como el conjunto de villas de Ciudad Jardín de Loiola.
También han sido catalogados del orden de 50 edificios residenciales en manzanas, mayoritariamente en la zona de Gros u otros del Centro u Ondarreta. Y además se han incluido 10 edificios singulares de diferentes tipologías, como edificios conventuales (Seminario Diocesano, las Salesas, Convento de Santo Domingo) y otra serie de edificios o espacios singulares (complejo de Deusto EUTG, el antiguo Mercado del Antiguo, la Clínica San Ignacio o el conjunto paisajístico del Tenis).
Se modifica por lo demás la catalogación de 15 edificios que pasan de grado C a grado B.
Grados de protección
El nuevo PEPPUC incluirá en grado A los nuevos Bienes Culturales declarados o incoados por el Departamento de Cultura del Gobierno Vasco como el Conjunto Monumental de la Parte Vieja y Muelle, Villa Aldama, los Depósitos Municipales de Agua de Ulia y el Peine del Viento.
En lo que al grado B se refiere, destaca la mayor protección asignada con este grado a 15 elementos anteriormente catalogados en grado “C”, entre los que están el edificio de la Equitativa, Getaria 2, varios edificios de la calle Prim y el Palacio de Congresos del Kursaal, entre otros.
Otros 22 nuevos elementos han sido incorporados al grado C. Se trata de 9 villas y de otros elementos como el edificio del Urumea de Moneo, el Seminario Diocesano, el conjunto de la EUTG de Mundaiz, el conjunto del Tenis, la Estación de Renfe o los conventos de Salesas y Dominicas.
Y cerca de 200 nuevos elementos pasarán a tener grado D de protección, mayoritariamente villas que destacan por su valor ambiental o paisajístico o edificios residenciales emplazados mayoritariamente en el Ensanche de Gros.
Rehabilitación energética de elementos catalogados
Por otro lado el nuevo Plan Especial de Protección del Patrimonio Urbano Construido incluye un nuevo artículo que regulará las posibles intervenciones de rehabilitación energética en fachadas protegidas incluidas en los grados B, C y D. Así se permitirá la utilización de sistemas de aislamiento térmico exterior, siempre que cumplan una serie de condiciones, como que las fachadas no sean de piedra, y siempre sujetas a la presentación de una consulta previa acompañada de la correspondiente valoración histórica-arquitectónica-constructiva del edificio.
Deja un comentario