(EFE). El mercado laboral ha seguido la tónica habitual en agosto y ha perdido el pasado mes 12.238 cotizantes a la Seguridad Social, tras un julio que comenzó a alejarse del récord del millón de cotizantes alcanzado en mayo, mientras el paro registrado se ha incrementado en 2.483 personas hasta las 108.658.
El número de personas inscritas a Lanbide es, sin embargo, el menor registrado un agosto en la comunidad autónoma desde 2008.
Euskadi se ha situado como la segunda comunidad con mayor aumento porcentual del desempleo en agosto (2,34 %), aunque cuenta con 5.100 desempleados menos que el mismo mes de 2022 (-4,48 %), según los datos facilitados este lunes por el Ministerio de Trabajo y Economía Social.
Gipuzkoa ha sido el territorio donde la subida del desempleo ha sido mayor (3,31 %), seguido de Álava (3,02 %) mientras en Bizkaia el incremento ha sido del 1,68 %.
Por sectores ha sido el de Servicios el que ha tirado de incremento del paro, con 2.128 desempleados más, seguido de Industria, con 485 desempleados más, y Construcción. con 142.
Por el contrario el apartado sin empleo anterior ha sido el que ha demostrado mejor comportamiento, con 261 apuntados menos a Lanbide. También ha bajado el paro en la Agricultura (-11).
Tras unos meses de mayo y junio en los el País Vasco superó el millón de cotizantes, julio se quedó a 2.266 de esa barrera tras perder 4.220. Pero en agosto el frenazo ha sido mayor al contabilizar 12.238 personas menos afiliadas a la Seguridad Social, con lo que la cifra total ha quedado en 986.497.
Sin embargo, en comparación con agosto del año pasado son 17.203 más, el 1,77 % de incremento.
Del total de afiliados en Euskadi, 493.354 cotizan en Bizkaia, 331.803 lo hacen en Gipuzkoa y 161.340 en Álava.
Reacciones
El Departamento vasco de Trabajo y Empleo ha remarcado el lado positivo de las cifras y ha subrayado es el agosto con menos desempleados desde 2008 y el de más afiliación de todos los registros, lo que significa a su juicio que «se ratifican todas las pautas que se habían consolidado en estos últimos meses», con la referencia de 2008, cuando Euskadi tenía los mejores indicadores de empleo.
La consejería que dirige Idoia Mendia ha destacado que los datos reflejan «un comportamiento habitual en un año excepcional» y marcan que hay «un suelo más sólido para la recuperación que se produce habitualmente en otoño», ha considerado.
Una interpretación que no coincide con la realizada por los sindicatos, que han lamentado el aumento del paro y han exigido la adopción de medidas tendentes a mejorar la calidad del empleo.
ELA ha advertido de que «el 77 % de los contratos firmados en agosto fueron temporales» y de que «la mitad «de los parados «no cobra ninguna prestación por desempleo», lo que evidencia «la precariedad» de las nuevas contrataciones y la «desprotección de la gente sin empleo».
Para LAB la reforma laboral «está posibilitando que el número de mujeres con empleo precario esté aumentando».
El sindicato abertzale ha precisado en una nota que desde mayo «se ha suspendido el 65,3 % de los contratos fijos discontinuos entre las mujeres».
Por su parte, CCOO ha lamentado que «los efectos positivos de la reforma laboral no consiguen frenar las consecuencias de la estacionalidad» al aumentar el número de parados en agosto, «como es habitual».
En su opinión, los datos de agosto constituyen «malas noticias esperadas que muestran que queda mucho por mejorar en el mercado de trabajo y que la labor iniciada con la reforma laboral debe ser mantenida para ir asentando los resultados y se deben abordar nuevas mejoras necesarias para impulsar, aún más, la calidad del mercado de trabajo».
UGT ha destacado que el aumento del paro en el sector servicios «no tiene sentido» en época «de fiestas y turismo récord» en Euskadi y ha reclamado que se aborde este asunto en la Inspección de Trabajo.
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