La ciudad de Donostia sigue adherida a la iniciativa internacional ‘Ciudades por la Vida/Ciudades contra la pena de muerte’, que se conmemora el 30 de noviembre desde hace 16 años. Por eso, la fachada de la casa consistorial se iluminará de rojo ese día, para reivindicar la abolición de la pena de muerte, que el año pasado supuso la ejecución de 993 personas en el mundo. Más de 2.000 ciudades de todo el planeta van a hacerlo también, incluidas más de 25 capitales de provincia del estado español.
La Jornada Mundial Ciudades por la vida es una iniciativa internacional que cuenta con el apoyo de la Coalición Mundial contra la Pena de Muerte, a la que pertenece Amnistía Internacional, junto con alrededor de 60 organizaciones, colegios de abogados y abogadas, sindicatos y autoridades locales y regionales de todo el mundo. Se conmemora en esa fecha en recuerdo de la primera abolición de la pena capital en el Gran Ducado de Toscana en 1786, y la impulsa la Comunidad de Sant’Egidio, grupo cristiano nacido en Roma.
En 2016 el Ayuntamiento aprobó una declaración institucional en la que se compromete a trabajar en todos los ámbitos de su competencia para que se creen espacios de información y sensibilización adecuados sobre los motivos del rechazo a la pena de muerte.
23 países con pena capital
Este noviembre de 2018, 123 estados han votado a favor de una resolución de la Asamblea General de las ONU que pide la suspensión de todas las ejecuciones en el mundo, como paso previo a la abolición global de la pena capital.
Según se recoge en el Informe Global de condenas de muertes y ejecuciones de la ONG Amnistía Internacional, durante 2017 se registraron 993 ejecuciones en 23 países. Se trata de una reducción del 4% respecto a 2016, con 1.032 ejecuciones, y del 39% respecto a 2015, cuando la organización informó de la cifra más alta desde 1989. La mayoría de las ejecuciones tuvieron lugar en China (donde no se tienen cifras fidedignas, ya que son secreto de estado) Irán, Arabia Saudí, Irak y Pakistán, por este orden.
Estados Unidos sigue siendo el único país de América que llevó a cabo ejecuciones, por noveno año consecutivo.
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