El buque oceánico Río Segura pasa por Donostia en su patrulla por la costa cantábrica

El buque oceánico Río Segura realizó la pasada semana una patrulla marítima por toda la costa cantábrica que le trajo a Gipuzkoa. Desde Asturias, pasando por Cantabria, hasta llegar al litoral guipuzcoano con el cometido principal de realizar distintas tareas de inspección de pesca y protección del medio ambiente. Por este motivo junto a la tripulación del Servicio Marítimo de Gipuzkoa de la Guardia Civil estaban embarcados varios técnicos e inspectores del Ministerio de Agricultura, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (MAPAMA).
En lo que afecta al litoral gipuzkoano las tareas de inspección se centraron principalmente en las labores desarrolladas por la flota pesquera a unas 15 millas al norte de Cabo Higuer, aunque durante la tarde del pasado martes el barco pudo ser visto durante unas horas frente a la costa donostiarra, tal como puede apreciarse en las imágenes.
El Río Segura está encuadrado actualmente en el Grupo Marítimo de Canarias de la Guardia Civil con sede en Las Palmas. Está en servicio desde diciembre de 2010 y por sus características (73 metros de eslora, 12 metros de manga, 1.700 toneladas métricas de desplazamiento) es el patrullero de altura más moderno y de mayor envergadura de los tres buques oceánicos con que cuenta el Instituto Armado. Puede alojar hasta 27 personas entre tripulantes y pasajeros (inspectores de pesca en este caso), y entre las zonas de vida y descanso incluye cocina, comedor, gimnasio, lavandería y enfermería.
Habitualmente opera en aguas del Mediterráneo y del Atlántico, donde además de labores de inspección pesquera participa con frecuencia en misiones de apoyo a FRONTEX para el control de la inmigración irregular y de colaboración y cooperación internacional, entre las que cabe citar las Operaciones HERA (en aguas de África frente a Mauritania y Senegal), INDALO (en el mar de Alborán) o TRITÓN (al sur de Italia).
Solo en las dos últimas ediciones de esta Operación, el Río Segura ha rescatado a más de 3.500 personas entre 2016 y 2017 según las informaciones de la Delegación de Gobierno.