Un grupo de voluntarios, en colaboración con Eguzki, se dedicó a recoger el sábado, de 5 a 7 de la mañana, los restos de la fiesta de Santo Tomás en Azpeitia. El resultado es este montón que se aprecia en la fotografía. «Muchos de los plásticos arrojados al suelo en las fiestas de los últimos años habrán acabado en el río y estarán ya en la mar», recuerda el colectivo ecologista. Y en este punto Eguzki recuerda a los Ayuntamientos que colocar rejillas al borde del río o del mar, que sería el caso de Donostia, resulta muy efectivo. Precisamente el Ayuntamiento de Azpeitia ha comenzado a hacerlo.
El Consistorio de Azpeitia ha instalado de momento 260 metros lineales de estas rejillas en la linde del Urola, pero el objetivo es llegar a los 850. A ello ha destinado un presupuesto de 20.000 euros. «Podemos estar contentos porque esas rejillas cumplen su función como muestra alguna de las fotos que remitimos», afirman desde Eguzki.
Gorka Alberdi lleva tiempo al frente de esta iniciativa que también ha tenido éxito en Azkoitia y que podría ser solución para tramos urbanos de Donostia pegados al río o al mar. Posibilidad que lleva tiempo apuntando. (Más información, aquí)
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