El Aita Mari ha localizado al amanecer un bote de madera sobrecargado y a la deriva en el que viajaban 102 personas. Tras equiparles a todos con chalecos salvavidas, se ha procedido a embarcarles en la nave de la ONG Salvamento Marítimo Humanitario (SMH). Después de varias horas en peligro en el mar, por fin, están seguros.
A la espera de ampliar información, hay 8 mujeres y un bebé a bordo.
El buque de rescate esperará ahora que las autoridades europeas asignen, como marca la ley, el puerto seguro más cercano. Por suubicación (34.5802 N/12.29154 E) debería de ser Malta, pero la isla siempre se ha negado a permitir desembarcos.
Este rescate se ha producido en un momento en el que hay muchas salidas de pateras desde costas africanas hacia Europa. Entre ayer y el miércoles casi 400 personas cruzaron desde Túnez a Lampedusa y Pantelleria (ambas islas italianas). Además, se conocieron dos naufragios el 14 y el 15 de febrero en Túnez (23 muertos) y en Libia (1 cuerpo recuperado) respectivamente.
El Aita Mari, antiguo pesquero de Getaria reconvertido en barco de salvamento gracias al apoyo, principalmente, de los gipuzkoanos y las instituciones vascas, acaba de llegar al enclave después de haber zarpado días atrás desde Almería.
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